Chuletas con zanahorias almendradas

Paso 1

Pela la cebolla y córtala en juliana. Rehógala en una sartén con un fondo de aceite, hasta que esté blandita y transparente. Añade el azúcar y caramelízala, removiendo con una cuchara de madera. Vierte el vino y el caldo, agrega la canela, salpimienta y deja reducir unos min.

Paso 2

Pela las zanahorias, lávalas y sécalas con papel de cocina. Dóralas en la plancha con unas gotas de aceite. Tuesta las almendras en una sartén sin añadir grasa y pícalas. Ponlas en un plato llano y reboza en ellas las zanahorias, de modo que se impregnen bien por todos lados. Lava una ramita de hierbabuena, sécala y disponla en el vaso de la batidora. Añade un chorrito de aceite y sal, y tritura la mezcla hasta obtener una salsita.

Paso 3

Lava los canónigos y alíñalos con esta salsita. Fríe las chuletas en un poco de aceite y sírvelas con las zanahorias y los canónigos. Complétalo con un arroz de Valencia Elige la variedad bomba para que quede suelto y firme después de cocerlo. Como absorbe muy bien los sabores, saltéalo con unos ajos y tendrás un plato riquísimo.