Pastel de verduras y arroz

Perfecto como entrante templado, ideal para sorprender sin complicarse la vida

Adrián Geralnik
Adrián Geralnik
Cocinero y fotógrafo

PASO A PASO PARA HACER PASTEL DE VERDURAS Y ARROZ:
PASO A PASO PARA HACER PASTEL DE VERDURAS Y ARROZ:
Cocina Fácil / RBA / FERRAN FREIXA
4 personas
60 min

5

(6 votos)

Dieta:

Mediterránea

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Baño maría

Rehogado

Tipo Plato:

Primeros platos y entrantes

Precio:

€ €

Dificultad:

Media

Sin gluten

Hay recetas que tienen ese algo especial que conquista a la primera. El pastel de verduras y arroz es una de ellas. Es sencillo, tiene un punto vistoso que da el pego cuando llegan invitados, y combina dos ingredientes que casi siempre tenemos en casa: arroz y verduras. Pero lo mejor es que admite mil versiones, así que puedes adaptarlo a lo que haya en la nevera sin miedo a estropearlo.

Este pastel de verduras y arroz es de esas recetas que salvan cualquier comida, ya sea una cena con amigos, una comida de domingo o un picnic al aire libre. Se puede preparar con antelación, se transporta bien y está rico incluso frío. Además, como no lleva ingredientes caros ni difíciles de encontrar, es una opción económica y resultona.

Si lo acompañas con una ensalada verde o unos tomates aliñados, tienes un menú completo y equilibrado sin complicaciones.

Este pastel funciona genial como primer plato, como acompañamiento o como opción vegetariana (aunque lleva nata y queso, así que no es vegano). Y, si tienes niños en casa, también es un truco estupendo para que coman verduras sin rechistar. Lo que se dice un plato de fondo de armario, que siempre queda bien y que no se pasa nunca de moda.

Ingredientes paraPastel de verduras y arroz

  • 1 Cebolla
  • 2 Dientes De Ajo
  • 1 Pimiento Rojo
  • 1 Calabacín
  • 200 gramos de Espinacas
  • 200 gramos de Arroz Basmati
  • Caldo De Pollo
  • 2 vasos de Nata Líquida
  • 80 gramos de Queso Mozzarella rallada
  • 3 Huevos
  • 12 Tomates Cereza
  • Aceite De Oliva
  • Sal

1. Pocha las verduras

Empieza pelando y picando la cebolla. Lava el pimiento, trocéalo también y póchalos juntos en una sartén con un buen chorro de aceite de oliva. Cuando empiecen a ablandarse, añade el calabacín en dados y deja que se cocine unos minutos más. Incorpora por último las espinacas cortadas en juliana, remueves bien, sala ligeramente y las saltea apenas un minuto, lo justo para que pierdan el volumen.

1. Pocha las verduras

2. Cuece el arroz

En otra sartén o cazo, sofríe los ajos picados en un hilo de aceite. Añade el arroz basmati, rehoga un minuto y vierte el caldo caliente, el doble de volumen que de arroz. Sala, baja un poco el fuego y deja cocer durante 8 minutos. No te preocupes si queda un poco entero, se terminará de hacer al horno.

2. Cuece el arroz

3. Monta el pastel

Engrasa un molde con un poco de aceite y vamos intercalando capas: primero una base de arroz, después una capa de verduras pochadas, y encima unos tomatitos cherry lavados. Repite hasta llenar el molde, procurando acabar con una capa de arroz. Bate los huevos con la nata, añade sal al gusto y el queso rallado. Viertes esta mezcla sobre el pastel y hornea al baño María durante 20 minutos a 180 ºC. Una vez cuajado, deja que temple unos minutos antes de desmoldar.

3. Monta el pastel

El truco

Como suele pasar con los pasteles salados, al día siguiente está incluso más bueno, con los sabores más asentados y la textura perfecta para cortar en porciones limpias.

Este pastel de verduras es una excelente forma de aprovechar restos de arroz cocido o de verduras al vapor. También puedes usar arroz integral si prefieres una versión más completa, aunque en ese caso tendrás que cocerlo unos minutos más. El queso mozzarella puede sustituirse por emmental, gouda o incluso un queso curado rallado si te apetece un sabor más potente.

Otra ventaja es que no contiene gluten, por lo que resulta ideal si tienes algún celíaco en casa o entre tus invitados. Basta con asegurarte de que el caldo también sea sin gluten. Y si prefieres una versión más ligera, puedes cambiar la nata por bebida vegetal (como soja o avena para cocinar) y usar menos queso.

Para darle un aire más festivo, prueba a decorar la superficie con láminas finas de calabacín o tiras de pimiento asado antes de hornear. También puedes añadir unas nueces troceadas entre capa y capa, o unas pasas para un toque dulce. Y si lo sirves en moldes individuales tipo flan, te quedará una presentación de restaurante.

Así que, si buscas una receta sabrosa, fácil y con un punto especial, este pastel de verduras y arroz lo tiene todo. Anímate a probarlo y verás cómo se convierte en uno de esos platos que repites una y otra vez.

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