Saludable y fácil: aprovecha el tallo del brócoli y prepara un sorprendente carpaccio, la versión fresca del clásico italiano

El carpaccio de brócoli es perfecto como entrante, para compartir o para una cena ligera. Es una receta fácil, diferente y deliciosa que te hará ver el brócoli de otra manera.

ruth puig cocina facil
Ruth Puig

Periodista especializada en gastronomía

Cargando vídeo: El truco para aprovechar el tallo del brócoli: carpaccio de brócoli

Cocina fácil / RBA / Belén Casal del Castillo

El truco para aprovechar el tallo del brócoli: carpaccio de brócoli
Cocina fácil / RBA / Belén Casal del Castillo
4 personas
20 min

Sé el primero
en votar

Temporada:

Todo el año

Tipo Plato:

Aperitivos y tapas

Primeros platos y entrantes

Acompañamientos

Precio:

€ €

Dificultad:

Media

Cuando pensamos en carpaccio inmediatamente nos viene a la mente la imagen de finísimas lonchas de carne cruda, normalmente de ternera, aderezadas con aceite de oliva, parmesano y rúcula. Esa es, sin duda, la versión más clásica de este plato italiano, pero con el paso del tiempo el carpaccio ha evolucionado, diversificándose en múltiples variantes que incluyen pescados, mariscos, hortalizas… ¡E incluso frutas!

Pero, ¿qué es exactamente un carpaccio? El término hace referencia a cualquier alimento cortado en láminas muy finas y servido en crudo o ligeramente marinado, generalmente acompañado de algún tipo de aliño o aderezo. El éxito de este plato radica en su sencillez y en la calidad de los ingredientes, que al no cocinarse, deben estar en su punto óptimo.

Un poco de historia

El carpaccio nació en Venecia en 1950 de la mano de Giuseppe Cipriani, fundador del famoso Harry’s Bar. Según cuenta la historia, una de sus clientas habituales no podía consumir carne cocinada por prescripción médica, así que Cipriani le preparó unas finas láminas de carne cruda aliñadas con una salsa suave. El plato fue bautizado como “carpaccio” en honor al pintor renacentista Vittore Carpaccio, conocido por los tonos rojizos que predominaban en sus obras, similares al color de la carne cruda.

Desde entonces, el concepto ha traspasado fronteras y ha inspirado todo tipo de adaptaciones. Carpaccio de salmón, de gambas, de champiñones, de remolacha, de tomate… ¡Incluso de piña! Y hoy sumamos una más a la lista: carpaccio de brócoli, una receta original, ligera y muy refrescante. 

Ingredientes paraSaludable y fácil: aprovecha el tallo del brócoli y prepara un sorprendente carpaccio, la versión fresca del clásico italiano

  • 1 brócoli mediano
  • Zumo de 1 limón
  • Sal y pimienta al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Lascas de queso parmesano
  • Semillas de sésamo tostado
  • Flor de brócoli (la parte verde más tierna), rallada

1. Prepara el brócoli

Comenzamos separando el tallo central del brócoli. Lo pelamos para eliminar la parte más fibrosa y dura y lo cortamos en láminas muy finas, lo más finas posible, casi traslúcidas. Para ello puedes ayudarte de una mandolina o de un cuchillo bien afilado.

2. Marina el carpaccio

Disponemos las rodajas de tallo de brócoli en una fuente o plato grande y las aliñamos con sal, pimienta y un buen chorro de zumo de limón. Este paso es clave: el limón no solo aporta sabor, sino que ayuda a ablandar ligeramente la textura del brócoli, haciéndolo más agradable al paladar. Déjalo reposar al menos 20-30 minutos.

3. Emplata

Una vez marinado, es el momento de darle el toque final. Reparte las lascas de parmesano por encima del brócoli, añade un hilo de aceite de oliva virgen extra y espolvorea con semillas de sésamo tostado. Para decorar y aportar un extra de color y sabor, puedes rallar un poco de la parte más verde del brócoli por encima, como si fuera una flor.

Trucos para una receta perfecta

  • El corte importa: Cuanto más finas sean las láminas, mejor será la textura del carpaccio. Si no tienes mandolina, enfría el tallo en la nevera antes de cortarlo para que sea más firme.
  • Marinar con antelación: Si puedes, deja el brócoli marinar una hora o incluso más. Ganará sabor y se volverá más tierno.
  • Personaliza el aliño: Prueba con un toque de ralladura de limón, unas gotas de vinagre balsámico o un poco de mostaza si te apetece experimentar.
¿Has preparado esta receta?

Marcar como cocinada

Notas de cocina

Comparte las notas de tu cocinado con otros usuarios o envía un mensaje privado

Mis notas
Las más útiles
Todas

¿Te ha gustado esta receta?

Puedes guardarla en tus favoritos, imprimirla o compartirla