¿Buscas una receta fácil y resultona que se prepare en muy poco tiempo? Aquí tienes una que cumple todas tus necesidades. Se trata de un timbal de pasta fresca y calabacín con huevo poché. En media hora ya lo tendrás listo para comer. Versátil y deliciosa, la pasta es un gran recurso en la cocina. Se puede combinar con un amplio abanico de ingredientes y siempre queda bien. En la receta de hoy, la pasta escogida son unas cintas y las hemos cocinado con calabacín , beicon crujiente, un huevo poché y, como toque final de sabor, hemos preparado una salsa muy cremosa de nata . Justo en el momento de llevar el timbal de pasta a la mesa, rompe el huevo con la punta de un cuchillo para que la yema se deslice por todo el plato y se mezcle con el resto de los ingredientes. Quedará genial. Las presentaciones en forma de timbal siempre quedan bien. Si buscas otras sugerentes ideas para lucirte en la mesa, no te pierdas el timbal de ensaladilla con gambas , el timbal de arroz y verduras o el timbal de pechuga de pollo desmechada . Consejos para que el timbal de pasta y calabacín con huevo quede delicioso Pasta siempre al dente. Cuece las cintas solo el tiempo que indique el fabricante en el envase, escúrrelas y mézclalas con la salsa de nata. Así se integrarán todos los sabores y la pasta estará riquísima. Más sabor. Antes de saltear el calabacín, añade una cebolla picada bien fina a la sartén y déjarla dorar unos minutos. Un huevo poché perfecto. La clave, para que te quede con la yema semilíquida y la clara bien cuajada y compacta, está en atar bien los paquetitos con hilo de cocina y dejarlos en el agua hirviendo solo 4-5 minutos. Al retirarlos ponlos en un bol con agua fría para parar la cocción. Sin aceite. Cuando prepares el beicon, no hace falta añadir aceite a la sartén porque se hará con su propia grasa. Queso rallado. Para que el queso parmesano conserve todo su sabor, es mejor rallarlo justo en el momento de usar.