Aunque la tempura es un plato típico de la cocina japonesa , su origen no es tan lejano, geográficamente hablando; esta técnica que está tan de moda en nuestros días, proviene de la vecina Portugal, donde se tomaba sobre todo en Cuaresma y de ahí tal vez su origen latino ( ad tempora quadragesimae ). Fue en los siglos XVII y XVIII cuando se popularizó en la cocina japonesa y se empezaron a rebozar todo tipo de alimentos, desde verduras a pescados o mariscos . La tempura es un plato saludable, siempre que no nos quede un rebozado aceitoso o se utilice un aceite de mala calidad. Masa para tempura Para 4 personas Ingredientes 250 gramos de harina 400 ml de agua cubitos de hielo aceite de girasol (o de oliva) para freír Paso a paso Pon agua en el congelador Vierte 400 ml de agua en un cuenco, tápalo con film de plástico y pásalo al congelador hasta que el agua esté muy fría. Echa cubitos a un bol Pon el agua fría sobre otro bol con hielos para que se mantenga bien fría durante todo el proceso. Añade la harina Agrega la harina al agua fría, sin dejar de remover con una cuchara de madera, hasta que obtengas una masa semilíquida. Calienta aceite Calienta abundante aceite en una sartén. Si utilizas el de girasol, es más suave de sabor, pero puedes utilizar igualmente de oliva. Reboza y fríe Sumerge las verduras en la masa semilíquida que hemos elaborado y fríe las piezas (verduras, gambas, etc.) en la sartén cuando el aceite esté caliente. Deja en papel absorbente y sirve caliente. Uno de los secretos de la masa de la tempura, como has visto en el vídeo, es que el agua tiene que estar muy, muy fría . Además de meterla un rato en el congelador, ubicamos el bol sobre otro con cubitos. Las piezas a rebozar de la tempura tienen que ser de bocado . Es decir, que las puedas coger y meter en la boca de un bocado . No hagas cortes grandes. El rebozado final debe quedar crujiente y ligero , y nada aceitoso, de forma que lo puedas coger con las manos, sin mancharte. Puedes hacer la tempura de verduras, de gambas o de lo que se te ocurra. Como la más clásica es la de verduras, te dejamos unos consejos para que te queden de 10. Cómo preparar una tempura de verduras perfecta Elige las verduras que prefieras: zanahoria, calabacín, cebolla, pimiento. .. Lávalas bien y sécalas con papel de cocina . Córtalas en bastones (la zanahoria, el pimiento...), en aros (la cebolla), en ramilletes (brócoli, coliflor) o medias rodajas (calabacín, por ejemplo). Cuando eches la harina para hacer la tempura, agrega una pizca de sal. Bátelo bien hasta obtener una textura como de nata . El aceite de girasol es más neutro de sabor . Tienes que calentarlo entre 180-200º C. Si no tienes termómetro de cocina, echa una gota de la masa de la tempura a la sartén . Si sube rápido a la superficie, es que ya está listo para la fritura. Una vez rebozadas las verduras en la masa de la tempura, fríelas en tandas pequeñas unos 2 minutos. No hay que echar muchos trozos a la vez a la masa para que esta no se caliente ni muchas piezas a la vez al aceite para que no se enfríe. Puedes utilizar unas pinzas de cocina para hacer la fritura y así no se te pegará la masa en los dedos. Una vez fritas las verduras en tempura, deja que escurran en un plato forrado con papel de cocina o en un colador. Sirve inmediatamente o perderán su textura crujiente. Se suele acompañar el plato de tempura de verduras de una salsa de soja o agridulce. Otro truquillo: si en lugar de agua fría, le añades agua con gas (tipo Vichy) o cerveza, le aporta mucha esponjosidad.