Hay días en los que solo quiero llegar a casa, ponerme el pijama y cenar en el sofá viendo mi serie favorita. Pero que no te engañe el momento “batín y manta”, eso no significa renunciar a una cena con estilo. Hoy te traigo un sándwich que perfecto para esos momentos. Este sándwich de salmón ahumado es todo lo que debería ser una cena exprés : sencillo, fresco, sin fogones de por medio y con un sabor que parece sacado de un restaurante de primer nivel. Y es que la combinación del salmón con una salsa de leche emulsionada, alcaparras, pepinillos y aceitunas tiene ese equilibrio entre salado y cremoso que te conquistará desde el primer bocado. Yo lo descubrí un viernes por la noche, cuando me encontré con un hambre que no admitía espera. Lo preparé en menos de 10 minutos , y desde entonces ha quedado instaurado como la cena oficial de los domingos perezosos. Te aseguro que, cuando lo pruebes, entenderás por qué. Es simplemente irresistible. Variaciones y versiones para todos los gustos Pan alternativo: Puedes usar pan de centeno, de semillas o incluso bagels para darle un aire más internacional. ¿No tienes salmón? Sustitúyelo por trucha ahumada o, para una versión vegetariana, por lonchas finas de aguacate. Salsa exprés: Si no te apetece emulsionar, puedes mezclar yogur natural con un poco de mostaza y eneldo. Es más rápida y ligera. Toque cítrico: Añadir unas gotas de limón o ralladura de lima a la salsa hará que el sabor se intensifique y resulte aún más fresco. ¿Por qué este sándwich es tan buena idea? Porque reúne lo mejor de varios mundos . Tiene ese punto sofisticado del salmón ahumado, el contrapunto ácido de los encurtidos, el frescor de las hierbas y la cremosidad de una salsa que parece mucho más elaborada de lo que en realidad es. Todo esto, además, sobre un pan que puedes encontrar en cualquier supermercado. Es una opción fantástica si tienes invitados imprevistos , si quieres llevarte algo especial al trabajo o simplemente si te apetece darte un capricho sin complicarte. Además, es tan versátil que puedes adaptarlo a lo que tengas en casa. Una cena digna de restaurante (pero sin salir del sofá) Este sándwich lo tiene todo, sabor, presencia y rapidez. En apenas 10 minutos, con cero cacerolas y apenas una batidora, puedes disfrutar de un bocado que no tiene nada que envidiar a una cena mucho más sofisticada . Así que ya sabes, la próxima vez que te apetezca una cena sencilla pero sabrosa , preparara este sándwich de salmón con encurtidos. Fácil, fresco, elegante y absolutamente delicioso. ¡Totalmente recomendable!