¿A quién no le gusta la brandada ? Suave, muy cremosa y con un delicado sabor a pescado, es una de esas elaboraciones sencillas, pero gustosas, que triunfan en todas las mesas y que solucionan tanto un aperitivo como una comida principal. Hoy le damos la vuelta a la brandada tradicional y la convertimos en un plato de auténtico lujo. ¿Cómo? Añadiendo a la mezcla un poco de trufa picada y su jugo. Está tan rica y tiene un sabor tan original que la puedes servir, incluso, para Navidad. Antes de servirla, gratínala unos minutos en el horno y llévala a la mesa calentita. Se convertirá en uno de tus entrantes favoritos. Otros platos que también pueden quedar bien en tu menú de celebración son unos chupitos de crema de lombarda con cigalas , unos saquitos de langostinos y shiitake o unos conos de pasta filo con confit de pato y cebolla caramelizada . Pela la cebolla. Limpia el apio y el puerro, raspa la zanahoria, y lávalos. Trocea todas las hortalizas y colócalas en una cazuela con 1 ramita de tomillo y el laurel, ambos lavados. Agrega agua abundante y cuece durante 30 minutos. Añade el bacalao y deja cocer durante 5 minutos. Luego, retíralo del fuego, déjalo enfriar y escúrrelo. Elimina la piel y las espinas, y desmenúzalo. Calienta el aceite con 2 dientes de ajo pelados y enteros, sin dejar que se doren. Retira y deja enfriar. Pela los ajos restantes, pícalos y rehógalos en 4 cucharadas del aceite aromatizado. Añade el bacalao y sofríelo 3 minutos. Incorpora la nata y mézclala bien. Luego, agrega 1 vasito del caldo de cocción previamente colado, 1 pizca de nuez moscada, sal y pimienta. Tritura la mezcla y ves añadiendo, poco a poco, el aceite aromatizado restante. Sigue batiendo hasta obtener una mezcla emulsionada, como una mahonesa. Incorpora la trufa picada y su jugo. Reparte la brandada en 4 cazuelitas. Gratina hasta que se dore y sírvela con las tostaditas. Consejos y variantes para la brandada de bacalao a la trufa Para una presentación más festiva , sirve la brandada en un vasito de boca ancha. En lugar de nata líquida, puedes utilizar leche . En esta receta es fundamental aromatizar bien el aceite de oliva con los ajos . Introduce 2 ajos enteros y pelados en el aceite y deja que se vayan infusionando a fuego bajo. Recuerda que los ajos no deben dorarse.