Cuando pensamos en berenjenas rellenas, nos viene a la cabeza la berenjena partida por la mitad en horizontal y rellena con carne picada y salsa de tomate. Pues esta receta es una revisión de ese plato, no solo a nivel de ingredientes, sino también de presentación.
Porque, para empezar, las berenjenas se cortan en trozos de unos 5 cm de grosor, lo que es mucho más práctico a la hora de repartir el plato entre los comensales, y también hace que la presentación del plato sea un poco más cuidada. En cuanto a los ingredientes, sustituimos la carne picada por más verduras, rehogadas en la sartén, en concreto calabacín, cebolla, zanahoria y tomate. Así se transforma un plato que tradicionalmente lleva carne en una receta vegetariana, llena de sabor y con muchas vitaminas.
Las berenjenas, calabacines y zanahorias son hortalizas que hoy en día puedes encontrar durante todo el año tanto en el mercado como en el supermercado, así que si te gusta este plato, podrás hacerlo siempre.
Puedes probar con las diferentes variedades de berenjenas que hay en el mercado. Las más convencionales, las de toda la vida, son las negras, pero también puedes encontrar berenjenas moradas, rayadas e incluso blancas. Y es que hay muchas variedades de berenjenas, no solo por su color, sino también por su forma (más alargada, más globoide...) y por su procedencia. Y aunque puede que los chefs prefieran unas u otras para según qué receta, la verdad es que para hacerlas en esta receta pueden funcionar todas.
Y si es temporada de berenjenas y buscas más recetas para preparar esta hortaliza, no te pierdas las berenjenas gratinadas a modo de pizza, las rellenas con pimientos y huevo, o prepara con ellas unas deliciosas croquetas con brie, que son una delicia con un sutil toque de curry. Te gustarán.