La combinación del sabroso guacamole con el salmón ahumado sobre un pan casero da lugar a una tosta riquísima con un punto gourmet. Para preparar esta apetitosa tosta de salmón con guacamole en plan rápido, solo tienes que untar una rebanada de pan con guacamole , añadirle unas tiras de salmón ahumado y cebolla morada, y decorarla con rúcula y huevas de salmón. Ahora bien, si quieres darle un toque realmente sofisticado, vale la pena animarse a preparar un pan casero o una hogaza de pueblo , y hacer el guacamole en casa, una salsa mexicana a base de aguacate machacado que suele llevar tomate, cebolla y chile o guindilla. Si te animas a hacerlo en esta tosta de salmón con guacamole, ya verás qué diferencia. El guacamole lo puedes incorporar también en el relleno de unas pechugas o acompañando a una hamburguesa de secreto . Lava y corta el tomate en dados y déjalo escurrir. Pela y pica la cebolleta. Pica una parte de la guindilla y corta en rodajitas el resto. Retira el hueso del aguacate, extrae la pulpa y riégala con la lima. Machácala con un tenedor, aliña con sal y aceite de oliva. Mezcla con el tomate, la guindilla picada, la albahaca y la cebolleta picadas. Pela la cebolla morada. Córtala en juliana y resérvala, aliñada con un poco de aceite y sal. Tuesta las rebanadas de pan, en el horno o en una plancha. Unta las tostas con una capa generosa de guacamole. Agrega las lonchas de salmón y espolvorea con pimienta. Termina la tosta con unas tiras de la cebolla morada y rúcula. Reparte unas huevas de salmón y unas hojas de rúcula sobre cada tosta para decorarlas. Riégalas con un chorrito de aceite de oliva virgen en el momento de servir. Trucos para sacar más partido a la tosta de salmón con guacamole –Si quieres darle un toque mucho más mexicano, pon cilantro en lugar de albahaca cuando prepares el guacamole. –Para ganar tiempo, puedes preparar el guacamole con anterioridad y solo tendrás que montar las tostas en el momento de servirlas. –Si el aguacate te ha salido verde, puedes madurarlo artificialmente en el microondas. Con piel y todo, pínchalo en varios puntos. Ponlo en un recipiente apto para microondas o con la campana protectora de plástico para impedir que explote al calentarlo. Ponlo a la máxima potencia 30 segundos, comprueba cómo está, y si todavía está muy duro, calienta 30 segundos más. Déjalo enfriar y utilízalo de la forma habitual. –Si quieres una alternativa al salmón ahumado, también queda muy rica con boquerones en vinagre, anchoas y sardinas o caballa en conserva en su lugar.