¿Quieres sorprender a tus comensales con un postre refrescante y llamativo que les conquiste por la vista y el paladar? Fíjate en este pastel de queso y limón que te presentamos hoy. Con una textura esponjosa y una cobertura de bonito color amarillo, este pastel es una auténtica exquisitez. Está tan rico que todo el mundo querrá repetir. Muy fácil de realizar, para que este pastel te quede perfecto, es importante trabajar bien la gelatina . Deja las hojas en remojo en un bol con agua fría durante unos 5 minutos para que se hidraten. Luego, escúrrelas, apretándolas bien, e incorpóralas a la mezcla de zumo y ralladura de limón , azúcar y agua . Recuerda que el líquido debe estar caliente, pero no hirviendo, ya que la gelatina perdería su poder gelificante. Otro paso que debes respetar a la hora de hacer este pastel es el tiempo de reposo. No tengas prisa y deja que cuaje, como mínimo, unas cuatro horas en la nevera. Transcurrido este tiempo, estará perfecto. Antes de servirlo, decóralo con unas rodajas de limón en espiral y unas hojitas de menta . ¡Quedará espectacular! Si te han entrado ganas de preparar otros pasteles, prueba a elaborar la tarta helada de limón y cereza , la corona de limón con glaseado o la tarta de limón sin horno . Consejos y variantes para el pastel de queso y limón Antes de servir el pastel, agrega por encima unas virutas o unos fideos de chocolate negro. En lugar de limón, puedes hacer esta tarta con naranja , mandarina … Incluso puedes usar zumo de piña o de pera . Este pastel también quedará muy bien con una base de galletas María . Tritura las galletas, mézclalas con mantequilla hasta formar una pasta y, luego, coloca esta sobre el molde, apretando un poco. Deja en la nevera 30 minutos para que se compacte y, luego, sigue con nuestra receta.