Si hay un dulce que nunca falla en casa, esos son los muffins . Gustan a todos, se hacen con ingredientes sencillos y tienen esa pinta entre rústica y mona que alegra cualquier mesa. Pero si encima los coronamos con un crumble doradito y crujiente … entonces ya entramos en la liga de los postres irresistibles. Estos muffins con frutos rojos y crumble de avena y almendra son justo eso, suaves, jugosos por dentro y con un topping que cruje a cada bocado. El contraste de texturas es una delicia, y lo mejor es que se pueden preparar en menos de una hora , sin complicaciones y sin necesidad de ser un experto repostero. Yo los suelo hacer los domingos por la mañana , cuando tengo un poco más de calma. Me gusta ese momento en el que la casa huele a mantequilla y almendra, y el horno empieza a calentar el ambiente. En cuanto salen, desaparecen. Entre el café, el desayuno improvisado y los “voy a probar solo uno”, se esfuman sin que me dé tiempo a guardarlos. Uno de los secretos para que estos muffins salgan perfectos está en el contraste de temperaturas , la mantequilla del crumble debe estar fría, mientras que la de la masa debe estar reblandecida. Así conseguimos que el interior sea esponjoso y el crumble quede bien definido y crujiente al hornear. La otra clave es no pasarse removiendo la masa . Una vez que añades la harina, mezcla lo justo para que se integre. Si lo trabajas demasiado, los muffins quedarán densos. Y si usas frutos rojos congelados, no los descongeles antes, así no teñirán la masa. Además, puedes personalizar esta receta según lo que tengas en casa . ¿No tienes frutos rojos? Prueba con trocitos de manzana , plátano o incluso chocolate. ¿No te gusta la avena? Sustitúyela por más harina o por coco rallado. Y si quieres darles un toque aún más especial, añade un poco de ralladura de limón o unas gotas de vainilla a la masa. Estos muffins con crumble son perfectos para un desayuno especial, una merienda con amigos o para llevar al trabajo y alegrarte la mañana. Se conservan bien durante varios días en un recipiente hermético y, si los calientas unos segundos en el microondas, vuelven a estar como recién hechos. Así que si buscas una receta sencilla, rica y con ese toque de repostería casera que tanto gusta, estos muffins te van a encantar . Son fáciles, versátiles y absolutamente deliciosos. Anímate a hornearlos. ¡Verás cómo se convierten en un clásico de tu cocina!