Cómo conseguir una salsa cremosa con los huevos
Para conseguir una salsa con una textura más cremosa (siempre que no uses nata líquida) puedes añadir un par de cucharadas del agua de cocción de la pasta. Esto le dará al huevo la consistencia que estás buscando, sin que llegue a cuajar del todo y se seque.
Qué tipo de queso se usa para hacer espaguetis a la carbonara
A pesar de que nosotros, en nuestra receta, nos decantamos por el queso parmesano, el queso que utilizan los italianos para hacer la salsa carbonara es el pecorino, una variedad italiana de queso curado hecha con leche de oveja, ligeramente más salado que el parmesano. También puedes usar una mezcla de ambos tipos de queso. El resultado será más equilibrado.
Y si quieres probar con un queso de nuestro país, puedes usar un manchego bien curado, incluso, uno de Mahón.
Un origen poco claro
Existen diversas hipótesis sobre la creación de la salsa carbonara y, alguna, está cargada de polémica. La más popular relacionaría su origen con los mineros que extraían carbón (de ahí carbonara) en las montañas de la cordillera de Los Apeninos. Los carboneros habrían empezado a preparar esta receta con ingredientes sencillos que tenían a mano: huevos, queso pecorino romano, guanciale (un embutido italiano curado sin ahumar elaborado con careta de cerdo) y pimienta negra. La realizaban rápidamente sobre una fogata, con el calor de las brasas. Poco a poco su receta se fue extendiendo por el resto del país.
Otra hipótesis señala que su nombre puede venir de la pimienta negra, uno de sus ingredientes principales, que aporta un color negro (de carbón) a la salsa.
La tercera de las posibles teorías relaciona la creación de la salsa carbonara con los soldados estadounidenses que se encontraban en Roma durante la II Guerra Mundial. Cansados de comer los típicos huevos fritos con beicon, pidieron otra receta distinta, pero con los mismos ingredientes. Hace unos años, un historiador gastronómico fue más allá sobre esta hipótesis y señaló que el inventor fue un soldado estadounidense que había combatido en Italia. Esto causó muchísimo revuelto en todos los sectores de la sociedad italiana, tanto políticos como gastronómicos.
Otras ideas en las que puedes utilizar la salsa carbonara
Aunque lo más habitual es acompañar la salsa carbonara con espaguetis u otro tipo de pasta como los fettuccine o los rigatoni, lo cierto es que se puede combinar con otros ingredientes y el resultado es… fantástico.
Cocina Fácil / RBA / CIRO ARAGONÉS
Prueba esta salsa, por ejemplo, con unos corazones de alcachofas a la plancha, con unos espárragos blancos cocidos o con unos ramitos de brócoli al vapor. También puedes usarla como relleno de unos champiñones rellenos. Respecto a las carnes, queda muy bien con pollo a la plancha (especialmente con la pechuga) o con pescados blancos, como el lenguado.
Con qué acompañar los espaguetis a la carbonara
No puedes decir que has hecho un menú italiano si no acompañas el plato principal de un antipasto (o entrante). En Italia se empiezan todas las comidas con un plato ligero para abrir el apetito, que pueden ser tanto ensaladas, como carpaccios, tablas de queso o embutidos de la zona. Aquí tienes algunas ideas, con sabor italiano, que te irán muy bien para abrir boca:
- Ensalada caprese. Ideal para servir cuando suben las temperaturas, esta ensalada es muy sencilla de realizar y queda deliciosa. En esta ocasión, la preparamos con varios tipos de tomates, queso mozzarella de búfula y unas hojitas de rúcula. Y para que esté todavía más sabrosa, se aliña con un aromático aceite de albahaca. Pruébala y no te arrepentirás.
- Ensalada panzanella con melocotón. Sencilla, pero muy vistosa y resultona, esta ensalada conquistará a tus comensales tanto por la vista como por el paladar. De origen campesino, se elabora con las mejores hortalizas de la huerta estival: tomates, calabacín, pimiento rojo y amarillo… También lleva aceitunas negras, trocitos de melocotón, que le aportan frescor, y unos daditos de pan dorados en el horno. Es perfecta para aprovechar el pan seco.
- Carpaccio de ternera con rúcula y tomates secos. Aquí tienes una receta, fabulosa y sin horno, que puedes servir en una comida especial. Para que la carne quede perfecta, envuélvela en film transparente y déjala en el congelador durante unos 30 minutos. Luego, ya la puedes retirar y cortar en filetes muy finos. Antes de servir, no te olvides de agregar unas lascas de queso parmesano por encima.
- Focaccia de aceitunas y cebolla roja. A la que lleves esta especialidad de la cocina italiana a la mesa, todo el mundo caerá rendido ante sus encantos. Y es que está buenísima. Se enriquece con hierbas aromáticas (romero y orégano), aceitunas negras y cebolla morada confitada en miel. Es algo entretenida, porque la masa tiene que fermentar, pero no es complicada de realizar.