Aunque sea un dulce típico del Día de Todos los Santos y Cuaresma, cualquier momento del año es bueno para endulzarse la vida con un buñuelo de viento . Y más si este está relleno de una delicada trufa , como los que os presentamos hoy. Para que sean ligeros y esponjosos , se hacen con pasta tipo choux , que es una masa de repostería extremadamente versátil empleada en un sinfín de elaboraciones (profiteroles, bocaditos de nata, relámpagos, eclairs, etc.) y relativamente fácil de elaborar. Más abajo te contamos cómo. También es importante que utilices harina de buena calidad y que metas los buñuelos en la sartén cuando el aceite esté muy caliente , pero sin llegar a humear. Para comprobarlo, echa una pizca de masa dentro. Si sube a la superficie y se dora rápido es que ya puedes freír los buñuelos. Por el contrario, si se queda en la base de la sartén, deberás calentar el aceite un poco más. Si te gustan los buñuelos dulces, prueba estas otras variedades; los buñuelos de pasas y piñones , los buñuelos de manzana y los buñuelos de viento rellenos de chocolate . Si te gustan las recetas regionales, no te pierdas estos buñueños de calabaza de la abuela valenciana. Trucos para unos buñuelos de viento rellenos perfectos Para evitar que los huevos se cuajen, es importante echarlos en la masa ya templada, de uno en uno y sin batir. Si utilizas la manga pastelera para cortar la masa, engrasa un cuchillo con aceite y córtala a medida que vaya saliendo. Así, la masa no se pegará a la boquilla. También puedes rellenar los buñuelos de crema, chocolate o manzana, por ejemplo. Perfuma los buñuelos con anís; llena un pulverizador con el licor y rocíalos antes de servir.