Con un look espectacular y un sabor delicioso, la tarta de queso marmoleada con chocolate blanco y negro es una apuesta segura cuando quieres sorprender a tus comensales con un postre muy vistoso, pero, al mismo tiempo, muy fácil de hacer. Como muchas tartas de queso , lleva una base quebradiza de galletas trituradas con mantequilla que le da un toque crujiente que combina muy bien con la crema de queso y chocolate del relleno. Y como es una tarta de queso sin horno , resulta mucho menos complicada de hacer que otros dulces que requieren horneado. Pero, eso sí, como la tarta de queso marmoleada con chocolate blanco y negro requiere unas horas de frigorífico para cuajarse, debes tener la previsión de hacerla con antelación. Una opción es prepararla por la mañana, bien temprano, para tenerla a punto para la comida o la cena. O bien, hacerla por la noche y tenerla lista al día siguiente. Si te atreves con un sabor más intenso prueba la tarta de queso Idiazábal o la tarta de queso con crema de limón . Cómo hacer el efecto marmoleado –El efecto marmoleado. Para conseguir este efecto bicolor, basta con verter irregularmente sobre la base las dos cremas de queso y chocolate. Y luego pasar la punta del mango de un cuchillo u otro utensilio, con movimientos circulares y zigzagueantes. Luego hay que pasarlo a la nevera para que cuaje.