Creado a comienzos del siglo XIV, por las monjas del convento del Espíritu Santo, en Jerez de la Frontera (Cádiz), el tocino o tocinillo de cielo se ha convertido en uno de los dulces más emblemáticos de la repostería de nuestro país. Y es que este postre tiene un sabor tan delicado a huevo y una textura tan tierna y suave, parecida al flan, que es una auténtica maravilla para el paladar. Si nunca te has atrevido a hacerlo en casa, no te pierdas la receta que te descubrimos hoy. Es facilísima y quedan unos tocinillos tan ricos que, realmente, te harán tocar el cielo. Para que te queden perfectos, es fundamental no batir en exceso la mezcla de huevos y yemas . Así no se incorporará demasiado aire a la preparación y no se formarán burbujas. Para conseguirlo, bátelos con un tenedor o unas varillas manuales. Luego, al añadir el almíbar , simplemente remueve hasta que esté bien integrado. Y un consejo más: antes de verter en el molde, acuérdate de pasar la mezcla por un tamiz o colador fino para eliminar cualquier grumo. ¿Te han entrado ganas de cocinar otros postres tradicionales? Fíjate en el arroz con leche , en los pestiños con miel o en las yemas glaseadas de Santa Teresa . Calienta el azúcar con 1 cucharada de agua en un cazo, hasta que esté dorado. Viértelo en un molde cuadrado de paredes lisas y bajas, y deja enfriar. Dispón 375 ml de agua en otro cazo, añade el azúcar y la cáscara de limón lavada, y remueve solo al principio para disolver el azúcar. Cuece hasta que empiece a hervir, aparta del fuego y deja enfriar; debe obtenerse un almíbar clarito. Precalienta el horno a 180°. Casca los huevos en un cuenco grande, añade las yemas y bate ligeramente, con varillas manuales, hasta que estén espumosos. Retira la cáscara de limón del almíbar y viértelo, ya frío, sobre la preparación anterior. Remueve hasta integrarlo y cuela la mezcla. Viértela en el molde preparado, tapa con papel de aluminio y colócalo sobre la placa. Agrega agua hirviendo hasta llegar a la mitad de la altura del molde, introduce la placa en el horno y cuece el tocino de cielo durante 40 minutos. Retíralo y espera a que se temple. Luego, pásalo a la nevera y déjalo reposar un mínimo de 4 horas antes de servirlo. Lava las grosellas y sécalas. Desmolda el postre sobre una fuente y córtalo en porciones cuadradas. Reparte por encima las grosellas y sirve en seguida. Consejos y variantes para el tocino de cielo tradicional A la hora de realizar este dulce, no te olvides de precalentar el horno . Así, en el momento de introducir los tocinillos, estará a la temperatura adecuada. Puedes reducir el tiempo de cocción si utilizas flaneras pequeñas o moldes individuales. Nosotros hemos decorado los tocinillos con unas grosellas, pero también puedes agregar fresas, frambuesas, moras… Incluso, unos rosetones de nata montada .