Panna cotta casera con frutos del bosque

Paso 1

Lava los frutos rojos, sécalos y ponlos en un cazo. Añade el zumo de limón y el azúcar, y cuece la mezcla unos 10 minutos, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera, hasta que espese. Retira y deja enfriar.

Paso 2

Dispón las hojas de gelatina en un cuenco y añade agua fría hasta cubrirlas; déjalas unos minutos. Mientras tanto, vierte en un cazo la leche y la nata. Añade 50 g de azúcar glas y la vainilla partida por la mitad a lo largo y ponlo al fuego. Lleva a ebullición, removiendo de vez en cuando, aparta y deja reposar unos minutos.

Paso 3

Escurre la gelatina y agrégala a la preparación anterior. Remueve hasta que se integre completamente. Reparte la crema en 4 moldes individuales y deja enfriar a temperatura ambiente; mezcla la crema, de vez en cuando, para que las semillas de vainilla no se vayan al fondo.

Paso 4

Tapa los moldes con film e introdúcelos en la nevera. Déjalos unas horas hasta que cuajen. Para desmoldarlos, introduce la base del molde unos segundos en agua caliente y reparte en platos.

Paso 5

Sírvelos decorados con la confitura de frutos rojos, con unas hojitas de menta lavadas y secas, y espolvoreados con el resto del azúcar glas.