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Galletas de avena con chocolate y vainilla

¿Te gustan las galletas de avena? Pues estas te encantarán. Solo tienes que mezclar mantequilla, con azúcar, huevo, copos de avena machacados, levadura, una pizca de sal, vainilla y pepitas de chocolate.

Adrián Geralnik
Adrián Geralnik
Cocinero y fotógrafo

PASO A PASO PARA HACER GALLETAS DE AVENA CON CHOCOLATE: RESULTADO FINAL.

PASO A PASO PARA HACER GALLETAS DE AVENA CON CHOCOLATE: RESULTADO FINAL.

Cocina Fácil / RBA / FERRAN FREIXA
4 personas
30 min

3

(32 votos)

Dieta:

Vegetariana

●

Temporada:

Todo el año

●

Técnica:

Horno

●

Tipo Plato:

Postres

●

Precio:

€ € €

●

Dificultad:

Fácil

●
Sin gluten

¿Te suena esa tarde en la que necesitas algo dulce, pero no quieres salir de casa? Ahí es cuando estas galletas de avena con chocolate entran en acción. Fáciles, rápidas y con ingredientes que probablemente ya tienes por ahí, son el tipo de receta que te hace sentir como si fueras un auténtico maestro pastelero sin despeinarte.

La combinación de avena y chocolate es como ese dúo inseparable que nunca falla. La avena le da un toque crujiente y saludable, y las pepitas de chocolate son puro placer. Estas galletas son perfectas tanto para desayunar con un café, como para esa merienda improvisada que alegra el día. Y sí, también funcionan de maravilla como regalito casero, sean para lo que sean estas galletas sencillas siempre triunfan.

Por si fuera poco, te informe que esta receta también deja espacio para improvisar. ¿Te apetece añadir frutos secos o cambiar el tipo de chocolate? ¡Adelante! Con estas galletas, todo vale. Te adelanto que con la receta que te traemos desde Cocina Fácil salen 20 galletas grandes y a cuál más deliciosa.

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Ingredientes paraGalletas de avena con chocolate y vainilla

  • 150 gramos de azúcar moreno
  • 175 gramos de copos de avena
  • 75 gramos de mantequilla
  • 50 gramos de pepitas de chocolate
  • 5 gramos de levadura en polvo
  • ½ cucharaditas de extracto de vainilla
  • 1 huevo
  • Sal

1. Derrite la mantequilla y mezcla

En un bol grande, derrite la mantequilla (puedes hacerlo en el microondas o al baño maría) y mezcla con el azúcar moreno y el huevo. Remueve bien hasta que se integren y tengas una mezcla cremosa.

1. Derrite la mantequilla y mezcla

2. Añade los ingredientes secos

Incorpora los copos de avena, la levadura, la sal y el extracto de vainilla. Mézclalo todo con una cuchara de madera. Cuando esté bien combinado, añade las pepitas de chocolate y asegúrate de que queden bien repartidas.

2. Añade los ingredientes secos

3. Enfría la masa

Forma un rulo con la masa, envuélvelo en film transparente y llévalo al frigorífico durante unos 30 minutos. Este paso es clave para que las galletas mantengan su forma al hornearse.

3. Enfría la masa

4. Hornea y disfruta

Precalienta el horno a 170 ºC. Saca la masa de la nevera, retira el film y corta rodajas de medio centímetro de grosor. Coloca las galletas en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, dejando espacio entre ellas. Hornéalas durante unos 10 minutos o hasta que los bordes estén doraditos. Deja que se enfríen antes de devorarlas… si puedes esperar.

El truco

Si quieres que tus galletas tengan ese toque crujiente irresistible, tuesta ligeramente los copos de avena en una sartén antes de añadirlos a la masa. El resultado será espectacular y el sabor mucho más intenso.

Hay algo maravilloso en estas galletas de avena con chocolate, es que son un lienzo en blanco listo para que dejes volar tu imaginación. ¿Te apetece darles un toque diferente? ¡No hay problema! Puedes empezar cambiando las pepitas de chocolate por chocolate blanco troceado o nueces picadas. ¿Prefieres un sabor más atrevido? Prueba a añadir una cucharadita de canela, o una pizca de nuez moscada para darles un toque especiado. Son tan versátiles que el único límite es tu imaginación.

Si lo que te interesa es tener unas galletas más saludables, no hay problema, tan solo tienes que sustituir el azúcar moreno por panela o sirope de agave, o bien reducir la cantidad de azúcar a la mitad. También puedes añadir frutos secos picados como almendras, nueces o avellanas para aportar un extra de crujiente. Si te atreves con un giro más sofisticado, añade una pizca de sal marina gruesa por encima de las galletas justo antes de hornearlas: el contraste entre dulce y salado hará que sean aún más irresistibles ¡La cocina es tuya, atrévete a personalizarlas!

Tienes que preparar tus propias galletas. Porque es una forma sencilla de darte un gustazo sin complicaciones. Además, el proceso de hacerlas es tan gratificante como el resultado. Nada como saber que lo que comes no lleva conservantes raros ni aditivos. Y, seamos sinceros, siempre es un buen momento para el chocolate. Estas galletas son perfectas para endulzar cualquier día y hacer que la casa huela a pura felicidad. ¿Quién se apunta a hornear?

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