Este postre es muy especial, es algo diferente que no se prueba todos los días aunque esté inspirado en postres tradicionales . Es vegano, es decir, que no lleva ni un solo ingrediente de procedencia animal (ni leche, ni huevos, ni miel...) pero aún así resulta irresistible. Eso sí, si no estás familiarizado con este tipo de alimentación quizá haya algunos ingredientes del listado de los que no hayas oído hablar jamás. Un ejemplo es el kuzu, una raíz que se utiliza como espesante a la hora de elaborar cremas, sopas y salsas y que aquí está presente en la crema de limón. El xilitol es un edulcorante y el agar-agar, un gelificante (como la gelatina ). Actualmente, puedes encontrar ambos sin problemas en las grandes superficies. Lo que más nos gusta de este postre, dejando a un lado que es vegano, claro, es que se sirve en vasitos. Este formato resulta superpráctico tanto para almacenarlo en la nevera como para servirlo cuando tenemos invitados. ¡Facilita muchísimo la tarea del reparto! Además te evitas ensuciar y los problemas típicos que nos da el tamaño de la ración que pide cada comensal. ¿Te animas a probarlo? Consejo: Si te ha gustado la idea del postre pero prefieres una versión más tradicional siempre puedes cambiar cada una de las tres elaboraciones por sus recetas clásicas. La crema de limón, el bizcocho y la gelatina de cardamomo se pueden hacer con ingredientes de siempre y luego combinarlos de la misma manera, en un vasito y por capas.