Banana split: el dulce clásico americano tan fácil que solo necesitas colocar los ingredientes

Si hay un postre que nos transporta directamente a una heladería clásica de los años 50, ese es el banana split. Nacido en Estados Unidos, este icónico postre se ha convertido en un símbolo de color y sabor. Es una combinación irresistible de plátano caramelizado, helado cremoso, fresones frescos, nata montada, nueces crujientes y, por supuesto, una generosa lluvia de sirope de chocolate.

Lo mejor de este clásico es que no necesita grandes técnicas culinarias, solo ganas de disfrutar de un dulce espectacular en cuestión de minutos. Perfecto para una merienda especial, un capricho de fin de semana o incluso como broche final de una cena entre amigos. Y sí, aunque es un postre bastante goloso, siempre se pueden hacer ajustes para adaptarlo a gustos más ligeros.

Si te gustan los clásicos postres americanos no te puedes perder el fantástico brownie esponjoso de chocolate y nueces, un postre típico ideal para cualquier ocasión. También tienes que probar a preparar los donuts caseros, los mejores roscos para merendar (o desayunar). Te aseguro que pocas cosas son más apetecibles cuando de desayunos o meriendas estamos hablando. Y si buscas el mejor colofón final para una comida familiar, la tarta de manzana americana no puede faltar en tu recetario, su combinación de sabores y su interior jugoso la hacen irrepetible.