El postre ligero y elegante de la abuela australiana: pavlova con coulis de fresón, helado de vainilla y chocolate blanco

El dulce tiene mucha historia, es personalizable y perfecto para dar un tan exquisito como irresistible a cualquier comida especial.

victor fernandez cocina facil
Víctor Fernández

Redactor y cocinero

Pavlova con coulis de fresón
Cocina Fácil / RBA
4 personas
80 min

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Temporada:

Todo el año

Técnica:

Técnica mixta

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Me encanta este postre, sobre todo porque causa sensación cada vez que lo coloco sobre la mesa. Te puedo asegurar que con la pavlova no hay fallo, el triunfo está asegurado. Su textura crujiente por fuera y suave por dentro la convierte en una opción irresistible para los que como yo se declaran amantes del dulce. Además, su versatilidad permite jugar con diferentes acompañamientos. Hoy desde Cocina Fácil vamos a preparar una versión deliciosa con coulis de fresón, helado de vainilla y un toque de chocolate blanco. Una combinación irresistible que arrancará aplausos de cuantos se sienten a tu mesa. Un postre que no solo es vistoso, sino también fácil de hacer en casa.

La historia de la pavlova es tan elegante como su presentación. Se dice que fue creada en honor a la bailarina rusa Anna Pavlova durante una de sus giras por Australia y Nueva Zelanda en la década de 1920. Su ligereza y su dulzura la convierten en un homenaje perfecto a la delicadeza de una gran artista. Así que, si quieres sorprender a tus invitados con un postre con historia, fácil y vistoso. ¡La pavlova siempre es una elección de diez!

 

Ingredientes paraEl postre ligero y elegante de la abuela australiana: pavlova con coulis de fresón, helado de vainilla y chocolate blanco

  • Para la pavlova
  • 2 claras de huevo
  • 100 gramos de azúcar glas
  • 8 bolas de helado de vainilla
  • Para el coulis
  • 150 gramos de fresones
  • 1 cucharada de azúcar
  • El zumo de 1/2 limón
  • Para decorar
  • 8 fresones
  • 2 cucharaditas de azúcar glas
  • 20 gramos de chocolate blanco
  • Unas hojas de menta

1. Prepara el merengue

En un bol, bate las claras con el azúcar glas utilizando varillas eléctricas. El truco está en batir lo suficiente hasta obtener un merengue bien firme y brillante. Si al girar el bol el merengue se mantiene en su sitio, está en su punto.

2. Da forma a los merengues

Pásalo a una manga pastelera con boquilla ancha y estriada y forma 8 rosetones sobre una bandeja forrada con papel de hornear.

3. Hornea

Introduce la bandeja en el horno precalentado a 80°C y cuece durante 1 hora, hasta que los merengues estén secos y firmes. Una vez listos, apaga el horno y déjalos reposar dentro durante 20 minutos más. Esto evitará que se agrieten con el cambio brusco de temperatura. Luego, retíralos y deja que se enfríen por completo.

4. El toque fresco: el coulis de fresón

Mientras los merengues están en el horno, es momento de preparar el coulis. Lava y limpia los fresones, retira el tallo y tritura la pulpa con el azúcar y el zumo de limón. Luego, cuélalo para conseguir una textura fina y sin semillas. Este coulis es perfecto para aportar un punto de acidez que equilibra la dulzura de la pavlova.

5. El montaje final

Coloca los merengues sobre una fuente, alternándolos con las bolas de helado de vainilla formando una especie de corona. Decora trozos de fresón, unas hojas de menta fresca y espolvorea con el azúcar glas y el chocolate blanco rallado. Por último, riega con el coulis de fresón y sirve de inmediato.

El truco

Añade unas gotas de zumo de limón al merengue. Te quedará más crujiente por fuera y esponjosa por dentro.

pavlova
Cocina Fácil / RBA

Consejos para una pavlova de cine

  • El secreto del merengue: Asegúrate de que el bol donde batas las claras esté limpio y seco, sin rastros de grasa, para que monten bien. Puedes pasarle un poco de zumo de limón antes de empezar.
  • No te pases con la temperatura: La pavlova se hornea a baja temperatura para que quede crujiente por fuera y esponjosa por dentro. Si el horno está demasiado caliente, el merengue se dorará en exceso y perderá su textura aireada.
  • Personaliza tu pavlova: Si prefieres un toque más exótico, puedes sustituir los fresones por mango o maracuyá, o incluso agregar un chorrito de licor al coulis para darle un punto sofisticado.

Un postre que enamora. La pavlova es uno de esos postres que nunca pasan de moda. Su presentación elegante, su combinación de texturas y su frescura la convierten en una opción ideal para cualquier ocasión especial. Además, es fácil de preparar y permite muchas variaciones, por lo que siempre se puede adaptar a los gustos de cada comensal.

Anímate a preparar esta pavlova con coulis de fresón y sorprende a tus invitados con un postre tan delicioso como vistoso. Una vez que la pruebes, te aseguro que se convertirá en un clásico en tu recetario. ¡Manos a la obra!

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