Las patatas son ese ingrediente todoterreno que todos tenemos en casa y que rara vez falla. Pero si te has cansado de servirlas siempre como guarnición o en forma de bravas , esta receta te va a encantar. Se trata de unos dados de patata cocinados con mimo, que se rellenan con una salsa picante cremosa y se coronan con un espárrago triguero para darle el toque final. Además de originales, son muy vistosos, y quedan genial como entrante en una cena informal o incluso como tapa improvisada . La gracia está en vaciar ligeramente el interior de las patatas y convertirlas en una especie de contenedor de sabor, con esa salsa rojiza que combina pimentón, cayena y ajo. Un bocado de los que no se olvidan. La receta es fácil y económica , pero tiene ese punto resultón que gusta tanto cuando tienes invitados en casa. Y si el picante no es lo tuyo, puedes ajustar el nivel de cayena o hacer una versión más suave con pimentón dulce y un poco de comino. Un bocado elegante con ingredientes de siempre Esta receta es ideal para darle una vuelta de tuerca a las patatas de siempre. Tiene una presentación elegante, un sabor potente y una textura suave por dentro y crujiente por fuera. Además, puedes dejarla casi lista con antelación y calentar justo antes de servir. Además, te adelanto que con esta receta puedes personalizar el picante para amoldarlo a tus gustos . Puedes ajustar el nivel de picante al gusto, usar guindilla fresca en lugar de cayena o incluso sustituir parte del caldo por un chorrito de nata líquida para suavizar la mezcla. Y si no tienes cebolleta, una cebolla tierna también da buen resultado. Aquí lo importante es que la salsa tenga personalidad. Con estos dados de patata rellenos, tienes una opción fácil, sabrosa y con un toque moderno para tus aperitivos . Una forma diferente de disfrutar de las patatas que gustará tanto a los fans del picante como a los que buscan nuevas ideas para sorprender. ¿Te animas a darle un giro a las patatas? ¡Pruébalas y verás cómo repiten!