Que las croquetas gustan a todo el mundo no es un secreto. Estos pequeños bocados crujientes, que empezaron siendo una receta de aprovechamiento, se han convertido en un auténtico manjar digno de una celebración o comida especial. Este es el caso de la receta de hoy, un aperitivo ideal para las fiestas navideñas que no dejará indiferentes a tus invitados, unas croquetas de rape y langostinos servidas con una ajonesa de ajo negro. Para darle sabor a la bechamel , se prepara un jugo con las cabezas de langostinos. Estas se sofríen en una sartén, se añade un poco de whisky , se deja evaporar y a continuación se incorpora la nata . Deja unos minutos que cueza a fuego lento y cuela. Con este jugo tendrás una bechamel muy sabrosa. Si te gusta servir croquetas como aperitivo, aquí tienes unas ideas originales que te van a encantar: prueba estas croquetas de bacalao , estas croquetas de espinacas con queso, piñones y jamón ibérico o estas croquetas de gambas y champiñones . Pela los langostinos y reserva las cáscaras y la cabeza. Pela y pica la cebolla y el ajo y sofríelos en una sartén con 2 cucharadas de aceite. Agrega el tomate y deja que se concentre. Sofríe las cabezas y las cáscaras de los langostinos. Cuando empiecen tomar color vierte el whisky y unos minutos más tarde, la nata. Deja cocer 5 minutos a fuego lento. Luego pasa por un chino y reserva. Pica las colas de langostino y el rape y sofríelos en una sartén con el resto del aceite y el sofrito, 3-4 minutos. Agrega la harina, mezcla y vierte el jugo de langostino y la leche, poco a poco y removiendo. Salpimienta y deja enfriar. Pela y corta el puerro en juliana fina, fríelo en una sartén con abundante aceite caliente y déjalo escurrir. Reserva. Forma las bolitas, pásalas por huevo batido, pan rallado, más huevo y avellanas picadas. Fríelas hasta que estén doradas y déjalas escurrir sobre papel de cocina. Sírvelas sobre un poco de ajonesa, coronadas con unas tiras de puerro frito. Trucos para tus croquetas de rape y langostinos Si quieres un rebozado que no se abra al freír, pasa las croquetas primero por harina, luego por huevo y por último el pan rallado . Déjalas enfriar en la nevera antes de freírlas. Fríe las croquetas en aceite bien caliente pero sin humear. El recipiente mejor que sea estrecho y alto para que se sumerjan enteras al freír. ¿Quieres darles un toque más crujiente? Utiliza pan rallado grueso.