Un plato perfecto para satisfacer a todos aquellos paladares con predilección por los gustos marineros ; rellenamos los calamares con sus patitas, un arroz esponjoso , piñones y pasas para luego cocerlos en vino blanco y tomate triturado, y el resultado es espectacular . Para saber que los calamares que compramos son realmente frescos es necesario que huelan a mar; sus cuerpos deben estar tersos y firmes; sus ojos deben verse negros y cristalinos y sus tentáculos no pueden estar separados de las cabezas. Hay quien los deja limpios y secos en la nevera durante un día para asegurarse de que su carne quede tierna. Aunque se pueden encontrar en las pescaderías todo el año, es en verano cuando abundan más y, por lo tanto, son más baratos. Por último, es aconsejable que adquieras piezas de un tamaño aproximado de unos quince centímetros. Si son muy pequeños te costará más rellenarlos. ¿Te entusiasman las recetas de calamares rellenos? Pues, los calamares rellenos de verduras y aceitunas con salsa , calamares rellenos de carne de ternera y cerdo y los calamares rellenos de quinoa y verduras no te decepcionarán. Variantes de los calamares rellenos de arroz: Los piñones puedes sustituirlos por almendras, avellanas y nueces. Para espesar el tomate triturado más rápidamente, añade un par de cucharadas de tomate concentrado. Si no dispones de vino blanco, mezcla cinco partes de agua con una parte de vinagre blanco y unas pizcas de azúcar. Otras hierbas aromáticas que combinan muy bien con esta receta son el laurel, el orégano, la mejorana, el tomillo, la albahaca y el romero.