Pablo Ojeda, experto en cocina sana, sobre las papas aliñás: "A mí me gusta la patata nueva, que quede cocida, al dente"

Las patatas son uno de los ingredientes más icónicos e imprescindibles de la gastronomía mediterránea, ideales para preparar todo tipo de guisos y también para servir como guarnición con diferentes platos de carne, pescado o vegetales. Ya sean fritas, asadas, cocidas o guisadas, son un ingrediente crucial dentro de la cocina de cualquier chef, así como las protagonistas de infinidad de platos, desde patatas a la importancia, a la riojana, a la reina, al ajillo...

En Andalucía, sin embargo, una de las formas más icónicas de prepararlas es con las conocidas patatas aliñás, que cada chef ajusta a su estilo para darle un toque único. Cocinadas con cebolla y un aliño de aceite, perejil, sal y vinagre, estas patatas son un básico que no faltan en ninguna taberna andaluza y que podemos cocinar de la forma más sencilla en nuestra casa, para conseguir un aperitivo socorrido, saciante y tan nutritivo como fresquito en las comidas especiales. ¿Cómo lograrlo? Con la receta más saludable del nutricionista Pablo Ojeda (@pabloojedaj). ¡Te contamos cómo las prepara!

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Si te gustan los platos protagonizados por patatas, debes probar esta receta de patatas al mayordomo, o unas patatas risoladas con mantequilla y aceite, que se convertirán en la guarnición perfecta

Las papas aliñás de Pablo Ojeda

Fáciles y rápidas de preparar, con una textura suave y un sabor fresquito que las convierte en un aperitivo perfecto para esta temporada. Descubre como preparar las papas aliñás más sanas de Pablo Ojeda, según él mismo explicó en una entrevista en 'La Sexta'.

Tan sabrosas como fáciles de preparar, las patatas aliñás son un acierto con el que triunfar en las comidas improvisadas de la temporada. A pesar de que son un básico del tapeo andaluz, sobre todo de Sevilla, su origen está en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) y, aunque el chef nos ha enseñado una receta muy sencilla para prepararlas, hay quienes asemejan su elaboración a un plato de ensaladilla rusa, acompañándolas de ventresca de atún y de huevo cocido y picos, para conseguir un contraste de texturas.

Aunque este plato es muy sencillo, las patatas cocidas también podemos tomarlas esta temporada a modo de ensalada campera, con atún, pimiento, tomate, huevo cocido y aceitunas, con lacón o chorizo cocido, para darle un toque gallego, o con unas almejas a la marinera, para aportarles un sabor más gourmet.

No obstante, también podemos machacarlas para crear un puré al estilo francés y convertirlas en el acompañamiento perfecto para los platos de pescados y carnes a la brasa que estamos seguras, no faltarán esta temporada entre las recetas de tus comidas familiares en el jardín. ¿El truco? Apuesta siempre por patatas nuevas, que tendrán mucho menos almidón y, por tanto, una textura mucho más agradable, sin grumos.