Las patatas son uno de los ingredientes más completos, saciantes y utilizados en la gastronomía mediterránea. Funcionan como guarnición para todo tipo de carnes y pescados, ya sea en forma de puré, asadas, fritas o a modo de chips, pero también protagonizan infinidad de recetas, como las patatas a la riojana, a la importancia, revolconas... Sea como sea, son un plato básico y resultón que en más de una vez nos ha sacado del apuro. Una de las formas más sencillas de prepararlas, es haciéndolo al ajillo, una receta que, además de un sabor potente y muy particular, tiene tantas versiones como chefs que las puedan preparar.
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Hoy te traemos la versión más sencilla, cremosa y crujiente de María José Martínez (@lasrecetasdemj), un plato tan sabroso como fácil de preparar, que ella acompaña con huevos a la plancha y que, en tan solo unos minutos, te convertirá en la mejor anfitriona de este verano. Con tan solo cuatro ingredientes, te contamos cómo puedes preparar estas patatas al ajillo tan irresistibles, que podrás servir tanto como aperitivo, como a modo de guarnición o de plato principal. "Esta receta, más rápida y simple, no puede ser, pero ¿Y lo rica que está?", asegura, ¿A qué esperas para descubrirlo?
Las patatas al ajillo de María José
Patatas, ajo y huevos es lo único que necesita la experta en cocina para crear uno de los platos más sencillos, saciantes y rápidos con los que podremos triunfar en cualquier comida del verano. ¡Descubre cómo las prepara!
Patatas al ajillo
Para 2-3 personas
Ingredientes
- 3 dientes de ajos
- 3 patatas medianas
- Aceite de oliva
- 2 cayenas. "Son opcionales. Si no te gustan, no se las pongas", cuenta María José.
- 2 huevos
- Sal
- Perejil fresco picado para decorar
Paso a paso
Prepara las patatas
Pela las patatas, lávalas, córtalas en trocitos regulares y cuécelas en abundante agua hirviendo. "El tiempo de cocción dependerá del tipo de patata y del tamaño. Las mías son de la variedad Monalisa, y las voy a tener 12 minutos. La patata quedará tierna, pero entera", explica la cocinera. Después, escúrrelas.
Prepara el ajillo
Pela los ajos y lamínalos y dóralos ligeramente en una sartén con aceite de oliva junto a dos cayenas. Después, incorpora las patatas y deja que se vayan dorando, cogiendo el aroma del ajo y la cayena. Cuando estén doradas a tu gusto, retíralas directamente al plato de presentación.
Fríe los huevos
En la misma sartén, incorpora un poco más de aceite y prepara dos huevos a la plancha, salados al gusto. Ella pone una tapa para que se cocinen más rápido.
Emplata
Cuando estén listos los huevos, colócalos sobre las patatas, espolvorea un poco de perejil picado sobre el plato y ya lo tendrás listo para disfrutar.
Tan sencillas de preparar como acertadas en cualquier ocasión, estas patatas son, además, un plato muy versátil, que podremos adaptar a nuestro estilo, combinándolas con infinidad de ingredientes.
Istock
- Por un lado, para darles un toque más clásico, podemos acompañarlas de un buen jamón ibérico, colocando unas lonchitas sobre el huevo, para que se cocine con el calor residual e impregne el palto del sabor. Podremos tomarlo como si fueran unos huevos rotos.
- Aunque si buscamos darle un toque campestre y un acabado más saciante, podemos completar el plato con rodajitas de chorizo tierno frito. Conseguiremos una receta mucho más sabrosa, ideal para acompañar de un buen pan de masa madre.
- Para darle un toque más gourmet, por otro lado, podemos acompañar nuestras patatas con unas setas o unos champiñones a la plancha y, si nos atrevemos, un toque de trufa.
- Por último, para dar un plus increíble, nada mejor que completar este plato con unas gulas con gambas al ajillo, logrando la combinación estrella ante la que caerán rendidos todos tus invitados.