Paisana, campera, campesina... Se llama así a la tortilla de patata tradicional enriquecida con otras verduras y, en ocasiones, también con chorizo o jamón serrano. T odo depende de tu gusto. Lo más habitual es agregar pimientos y calabacín, como en este caso. Pero, según la temporada, se puede hacer con berenjena, espárragos, habas, guisantes, ajetes... o lo que tengas para gastar en la nevera. Es lo bueno de un plato tan versátil como la tortilla, que admite casi cualquier tipo de ingrediente. El queso, por ejemplo, es también un buen candidato para combinarlo con verduras, especialmente con aquellas de sabor más suave como es el calabacín. Puedes rallar el queso y mezclarlo con el huevo batido o cortarlo en pedazos muy finos y agregarlo junto a la verdura. Y es que, una de las particularidades de esta tortilla es que se prepara por capas. Primero se pone en la sartén la mitad del huevo , luego se añaden las patatas, después el pimiento y por último el calabacín seguido del resto del huevo . Ya solo queda dar la vuelta a la tortilla para cuajarla por el otro lado y listo. Un plato sencillo y nutritivo que seguro que gustará a toda la familia. Consejos: Para conseguir un mejor resultado, corta el calabacín con una mandolina . Si no tienes siempre puedes usar un cuchillo bien afilado pero un truco para ir más rápido que también funciona es cortarlas con un pelador. Puedes personalizar esta tortilla al gusto, el único requisito es mezclar las patatas con cualquier otro tipo verdura que tengas en la despensa o esté de temporada.