Los suspiros de amante son un dulce típico turolense, inspirado en la trágica historia de amor de los amantes de Teruel , y que está hecho tradicionalmente con huevo, mantequilla, azúcar, queso y masa quebrada u hojaldre. Aquí, sin embargo, hemos hecho nuestros suspiros de amante con unas tartaletas de obleas de empanadilla en lugar de con las masas más habituales. Las obleas de empanadilla son un tipo de masa que ya viene preparada y que sirve para hacer todo tipo de platos dulces y salados. Aparte de las clásicas empanadillas, se pueden hacer desde tulipas hasta cucuruchos o cestitas , por poner algunos ejemplos. Y la crema de queso de los suspiros de amante se puede hacer con varios tipos de queso, pero es habitual hacerlo con quesitos en porciones, como hemos hecho en nuestra versión. Trucos para sacar más partido a los suspiros de amante Un rato antes de ponerte manos a la obra, saca los ingredientes de la nevera para que, en el momento de cocinar, estén a temperatura ambiente y te resulte más fácil trabajar con ellos. Para que los suspiros de amante queden más sabrosos, puedes incorporar una cucharada de almendra molida cuando estés haciendo la crema de queso. Le dará un toque riquísimo. Como la crema de queso ya está cocinada, solo tienes que hornearlos con la función de grill o de gratinar para que se doren un poco por encima y la masa de las empanadillas se acabe de hacer. Si tienes prisa, en lugar de con obleas de empanadilla, también puedes hacer los suspiros de amante con tartaletas de las que venden ya precocinadas.