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Pechugas al horno con mozzarella y salsa de tomate

Deliciosas y muy sencillas de hacer, estas pechugas de pollo al horno conquistarán el paladar de toda tu familia. Y, si tienes niños en casa, las van a devorar.

Aurora Gonzalo
Aurora Gonzalo

Periodista especializada en gastronomía

Pechugas de pollo al horno con mozzarella y salsa de tomate

Prueba estas suculentas pechugas de pollo al horno con mozzarella y tomate.

Cocina Fácil
4 personas
45 min
388 Cal

5

(13 votos)

Dieta:

Mediterránea

●

Temporada:

Todo el año

●

Técnica:

Técnica mixta

●

Horno

●

Tipo Plato:

Segundos platos y platos principales

●

Precio:

€ € €

●

Dificultad:

Fácil

●

Si tienes prisa y quieres ganar tiempo, puedes preparar la salsa de tomate con antelación y, luego, calentarla en el horno a la vez que se asa el pollo.

Respecto a la mozzarella, un consejo: procura escurrirla bien antes de cortarla en rodajas para que el suero que suelta no humedezca las pechugas.

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Ingredientes paraPechugas al horno con mozzarella y salsa de tomate

  • 4 pechugas de pollo
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 bola de queso mozzarella
  • 1 cucharada de orégano seco
  • 400 mililitros de tomate triturado
  • 1 pizca de azúcar
  • aceite de oliva
  • pimienta negra
  • sal
  • hojas de albahaca

1. Limpia las pechugas

Antes empezar a hacer la receta, debes limpiar muy bien las pechugas. Para ello, retírales todas las ternillas y los huesecillos, si los tienen, y elimina también el exceso de grasa. Seca la carne pasándole, por todos lados, una hoja doble de papel absorbente. A continuación, espolvoréala con sal y pimienta recién molida.

2. Rehoga la cebolla

Pela la cebolla y los ajos, y pícalos. Corta la bola de mozzarella en 4 rodajas. Pon al fuego una cazuela con un fondo de aceite, añade la cebolla y rehógala 5 minutos, hasta que esté transparente. A continuación, agrega el ajo y sofríelo unos instantes, sin dejar de remover, para que no tome color.

3. Incorpora el tomate

Espolvorea la verdura con el orégano, mezcla bien e incorpora el tomate triturado. Condimenta con sal, pimienta y una pizca de azúcar, y remueve. Tapa la cazuela y cocina durante 15 minutos, a fuego muy suave y mezclando a menudo con una cuchara de madera.

4. Saltea el pollo

Mientras espesa la salsa de tomate, saltea las pechugas de pollo en una sartén con un hilo de aceite, hasta que se doren por todos los lados.

5. Reparte la mozzarella

Precalienta el horno a 180°. Mientras, vierte la salsa de tomate preparada en una fuente refractaria, coloca encima las pechugas y cubre cada una con 1 rodaja de mozzarella.

5. Reparte la mozzarella

6. Cuece en el horno

Dispón la fuente en la placa, introduce esta en el horno, a media altura, y prosigue la cocción de la carne aproximadamente 25 minutos.

7. Emplata y sirve

Retira la fuente del horno y deja reposar la carne 5 minutos. Después, reparte las pechugas en los platos, con la salsa de tomate, decóralas con unas hojas de albahaca lavadas y sírvelas.

El truco

Cuece 200 g de arroz jazmín o basmati hasta que esté al dente y, después, saltéalo con unas gotas de aceite y sírvelo con el pollo.

Si te han entrado ganas de descubrir otras recetas con pechugas de pollo, echa un vistazo al pollo marinado en soja con coles de Bruselas, a la ensalada de pollo con aguacate y manzana o a los pastelitos de hojaldre rellenos de pollo al curry.

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