Si hay una receta que no falta en ninguna cocina, es la salsa de tomate. Está en el ADN de las albóndigas, en la base de cada pizza que se precie, en cualquier plato de pasta y hasta en muchos guisos de cuchara. Pero no todas las salsas de tomate son iguales, y el chef Mario Sandoval lo tiene clarísimo: “Lo más importante es usar ingredientes naturales”.
El cocinero madrileño, con dos estrellas Michelin, ha compartido su receta favorita de salsa de tomate casera, la que prepara tanto en casa como en su cocina profesional. La suya es una salsa sencilla, rápida y muy aromática, pero sobre todo, natural y sin trampa ni cartón. Nada de aditivos, colorantes ni espesantes. Solo ingredientes de verdad, buen tomate como los que usaría tu abuela.
Y para redondearlo, también nos ha contado los tres trucos infalibles que él usa para conservarla y tener siempre un bote a mano con ese sabor casero y sabrosón que da mil vueltas a cualquier versión de supermercado. Si te gusta cocinar en casa pero a veces vas justo de tiempo, esta receta te va a venir como anillo al dedo.
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Receta de salsa de tomate casera con el toque de Mario Sandoval
Para 4 personas
Ingredientes
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- Sal al gusto
- Hierbas aromáticas (romero, tomillo u orégano)
Paso a paso
Escalda los tomates
Lava los tomates en rama y haz una cruz en la base con un cuchillo. Llévalos a una olla con agua hirviendo durante unos 30 segundos. Sácalos, pásalos por agua fría y pélalos con cuidado. Este paso es esencial para que la salsa tenga una textura suave, sin restos de piel.
Pocha la cebolla
En una sartén amplia, añade un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y caliéntalo a fuego medio. Corta la cebolla en trozos pequeños y póchala hasta que esté transparente. Esto tarda unos 4-5 minutos.
Añade las hierbas aromáticas
Incorpora las hierbas aromáticas al gusto, “Me gusta añadir hierbas que le aporten un poquito de alegría, de vida” afirma el chef. Tomillo, orégano o incluso romero. A Mario le gusta que la salsa tenga ese punto aromático que la diferencia. Remueve bien para que la cebolla coja todo el sabor de las hierbas.
Agrega los tomates
“El tomate en rama para hacer salsa es ideal”, dice Mario Sandoval. “Trocea los tomates pelados sobre una tabla para que suelten todo su jugo y su azúcar natural. Añádelos a la sartén con la cebolla y las hierbas. Sube un poco el fuego y deja que todo se cocine junto durante 10 o 12 minutos. No hace falta más: en poco tiempo los sabores se concentran y el tomate se transforma en una salsa deliciosa y brillante.
Rectifica de sal
Al final de la cocción, prueba y añade sal al gusto. Puedes triturarla si te gusta más fina o dejarla rústica, con los trozos de tomate, como prefiere el chef.
3 trucos de Sandoval para conservar la salsa de tomate
Una de las recomendaciones más interesantes de Mario Sandoval es hacer bastante cantidad de salsa y conservarla. Así te ahorras tiempo y siempre tendrás un bote casero listo para lo que surja: unas albóndigas rápidas, una lasaña improvisada o una cena exprés de pasta con queso rallado. Aquí van los tres trucos del chef para conservarla como un profesional:
1. Tarros de cristal de gran calidad
No vale cualquier frasco. Según Sandoval, “para conservar necesitamos un tarro de cristal de gran calidad”. Esto garantiza que se pueda cerrar herméticamente y soportar el calor del proceso de pasteurización sin romperse. Y lo más importante: evita contaminaciones.
2. Guardar con las hierbas aromáticas
Cuando vayas a envasar la salsa, no retires las hierbas. Déjalas dentro del frasco, ya que seguirán aportando sabor con el paso de los días. Es un gesto sencillo pero muy efectivo. “Me gusta añadir hierbas que le aporten un poquito de alegría, de vida”, insiste Mario.
3. Pasteurizar al baño maría
Una vez llenos los botes, tápalos bien y cocínalos 10 minutos al vapor o al baño maría. Este proceso de pasteurización asegura que se eliminen bacterias y la salsa dure semanas —incluso meses— en la despensa sin estropearse. Luego, solo tienes que abrir, calentar y disfrutar.
El sabor de siempre con un toque Michelin
Lo que más sorprende de esta receta es su sencillez. No lleva azúcar añadido, ni especias raras ni técnicas complicadas. Solo buenos tomates, cebolla, AOVE y las hierbas justas para convertir una salsa casera en algo especial. Como dice el propio Mario, “lo más importante es usar ingredientes naturales”, y se nota.
Además, los trucos para conservarla hacen que preparar una gran cantidad sea incluso más práctico. En un par de horas puedes tener cinco o seis botes listos para el mes. Y con eso, media cocina resuelta.
Tu aliada para todo el año
Esta salsa de tomate casera te va a servir para prácticamente cualquier receta: desde un arroz al horno hasta una berenjena rellena. Y con la garantía de que no lleva nada raro. Solo sabor real. Solo cocina de verdad.
¿Y lo mejor? Que puedes adaptarla a tu gusto: un poco de albahaca si quieres darle un aire italiano, un poco de picante si te va la marcha, o incluso añadir zanahoria rallada si buscas una versión más dulce.
Anímate a probarla en casa
Con esta receta de Mario Sandoval y sus tres trucos de conservación, ya no tienes excusa para volver a comprar salsas industriales. Solo necesitas tomates en rama, ganas de cocinar y un rato libre un domingo por la mañana. El resultado te va a encantar: una salsa casera, sabrosa y lista para elevar cualquier plato a nivel restaurante. ¿Te animas a probarla?