El sofrito que hace que tus lentejas queden siempre ricas

¿Te quedan las lentejas sosillas? Seguro que no preparas un buen sofrito para que el resultado final sea de 10. Aquí tienes unos buenos consejos

ESTOFADO DE LENTEJAS CON ARROZ.

Un buen sofrito es el alma de las lentejas.

Cocina Fácil

A mí las lentejas no me salen bien. ¿A ti también te pasa? Parece un plato sencillo: echar verduritas, las lentejas rápidas (sin remojar porque no tienes tiempo...), y algo de chorizo, panceta o costilla en crudo y ¿listo? Eso hacía yo...

Pero he descubierto gracias a los consejos de la abuela, de chefs y amigas mejores cocineras que servidora que, con un buen sofrito el plato pasa del "si quieres las comes y si no las dejas" a que no quede ni rastro en el plato...

Así que, si quieres que las lentejas te queden de chef y dispones de tiempo, empieza por preparar un sofrito clásico en la sartén o en una cazuela. Para hacerlo bien solo necesitas paciencia para guisar en su punto las verduras, ir removiéndolas de vez en cuando y que estas sean frescas y de calidad. Deja que las verduras se vayan cocinando lentamente, con calma, para que se caramelicen y los líquidos de vegetación se evaporen. Contra más espeso quede el sofrito, más rico quedará. Notarás la diferencia.

La elección de ingredientes está en tus manos, pero no puede faltar: zanahoria, puerro, cebolla, ajo, tomate o pimiento (rojo o verde). También puedes agregar puerro, calabacín, berenjena, apio, setas variadas… Deja volar tu imaginación. Respecto al aceite de oliva que también sea de la mejor calidad. Así lograrás un sabor único.

Cuando las verduras estén listas, vierte el agua (o mejor aún caldo de verduras casero), una hoja de laurel y las lentejas remojadas previamente. Deja cocer entre 45-50 minutos (algo menos si son de cocción rápida como las verdinas) y… a comer.

    ¿Quieres enriquecer tus lentejas con patata o arroz?

    Poner o no patata al guiso de lentejas va a gustos, pero no la añadas troceada en el sofrito. Si quieres añadírsela debería ser durante la cocción de las legumbres, cuando falte poco para que estén (dependiendo del tamaño a la que cortes la patata).

    Igualmente, si les pones arroz, que sea al final calculando que necesita unos 15 minutos para cocerse.

    Otros ingredientes extra para enriquecer tus lentejas

    • Las hierbas aromáticas siempre aportan un gran sabor a los platos y, evidentemente, también al sofrito. Puedes usar tomillo, romero, orégano, albahaca… Agrégalas cuando el resto de ingredientes del sofrito ya estén pochaditos.
    • También puedes añadir la pulpa de un pimiento choricero al sofrito. Para poder retirarla bien, deja el pimiento en remojo en un cuenco con agua tibia durante 1 hora. Luego, escúrrelo y raspa la pulpa con una cuchara o un cuchillito.

    ¿Tienes poco tiempo para realizar el sofrito?

    • Una forma fácil y rápida de dar más sabor con las verduras que añadimos es poner en la olla las hortalizas en pedazos grandes (zanahoria, puerro, tomate, ajo, cebolla...).
    • Cuando ya está cocido el guiso, sacamos las verduras (que, al no haberlas troceado, se cogen mejor), las trituramos y las volvemos a echar a la olla. Así quedará más espeso y sabroso el caldo de las lentejas.
    • Y para una versión exprés de sofrito, si echas un chorrito de aceite virgen extra a la sartén, un par de dientes ajos y una pizca de pimentón dulce de la Vera, lo doras unos minutos y lo echas a las lentejas con el puré de verduras, el resultado del plato será aún más sabroso.
    sofrito

    ¿Puedo congelar el sofrito?

    Realizar un buen sofrito lleva su tiempo, por eso te recomendamos que prepares más de la cuenta y lo congeles. Así optimizarás el tiempo invertido. Una buena idea es verterlo en una bandeja para realizar cubitos de hielo y dejar que las piezas se congelen. Luego, retíralas y guárdalas en un recipiente hermético o en bolsas de congelación. De esta manera, tendrás siempre a mano un sofrito casero que aportará un delicioso sabor a cualquier plato.

    Un apunte: no es necesario que descongeles el sofrito. Coge las porciones que necesites y échalas directamente en la cazuela o sartén.

    Otra forma de conservar tu sofrito es guardarlo en botes pequeños de cristal, previamente esterilizados, y cocerlos en una olla al baño María para que hagan el vacío. Con este sistema, se conservarán durante meses.

    Otras ideas con lentejas

     

    LENTEJAS CON CHORIZO
    Cocina Fácil / RBA / A.J.J. ESTUDI, S.C.P.

    Si te gustan las lentejas al estilo tradicional, puedes añadirles chorizo, morcilla, costilla, panceta o la carne que prefieras (también puedes dorarla previamente antes de introducirla al guiso). Otro clásico son las lentejas "viudas", solo con verduras. También puedes darle un toque con azafrán, pimentón o pimiento choricero. Los chefs más arriesgados incluso les dan un toque de curry o incluso de jengibre fresco rallado. ¡Pruébalo si quieres innovar!

    Sofrito: una elaboración muy versátil

    Elaboración estrella de nuestra querida cocina mediterránea, el sofrito, con algunas variantes, es la base de muchísimos platos. Se puede usar en arroces y pastas, en guisos y estofados, en carnes y huevos… Ya lo ves, es un gran aliado. Y para demostrártelo, aquí tienes una muestra:

    • Arroz meloso con conejo y setas. Perfecto para servir en una comida de domingo o en un día especial, este arroz causará sensación a la que lo lleves a la mesa. Queda suave, cremoso y con un sabor… espectacular. Si no es temporada de setas, no te preocupes, puedes usarlas en conserva o deshidratados.
    • Guiso de garbanzos con almejas, langostinos y jamón. Los garbanzos cocinados con las almejas, los langostinos y el jamón serrano forman una combinación de auténtico lujo. Te aconsejamos que acompañes este guiso con unas rebanadas de pan porque el caldito que se forma está de rechupete. Ya verás: van a dejar el plato limpio.
    • Guiso de costillas de cerdo, con patatas y zanahorias. Si te gustan los platos de la abuela, esta sugerencia es perfecta para ti. Las patatas quedan suaves, gustosas… y las costillas de cerdo se deshacen en la boca. Al sofrito se agrega pimentón y pimiento choricero.
    • Bacalao rebozado con sofrito de pimientos. En esta ocasión, acompañamos un sencillo pescado frito, rebozado con huevo y harina, con un sofrito realizado con pimientos, cebolla, dientes de ajo, tomate y un chorrito de vino blanco. Tiene un sabor te conquistará.