Hay recetas que lo tienen todo para triunfar: son fáciles, tienen buena pinta y además sorprenden. Pues estos enrollados de marisco son de esos. Una mezcla muy resultona con gambas, surimi, quinoa y salsa hoisin que se presenta envuelta en una tortilla de maíz, como si fuera un burrito de los de moda. ¿Te suena sofisticado? Tranquilo, porque se prepara en menos de 10 minutos y queda ideal como aperitivo, entrante o incluso como cena ligera . En casa los descubrimos casi por accidente, un día que nos sobró un poquito de una receta con quinoa y teníamos unas gambas cocidas por ahí dando vueltas en la nevera. Como buen reciclador de sobras —porque lo de tirar comida es pecado en mi cocina—, improvisamos algo parecido a lo que te presento hoy. El resultado fue tan bueno que desde entonces se ha convertido en un recurso fijo para los días con prisas o visitas inesperadas. Y es que estos enrollados lo tienen todo: proteína del marisco, la quinoa como base saludable y saciante, verduras crujientes y ese toque asiático que le da la salsa hoisin. Lo mejor es que puedes dejarlos preparados y servirlos fríos, o incluso pasarlos un minuto por la plancha para que queden tostaditos por fuera . Vamos, un lujo de receta fácil con aire gourmet. Un bocado ligero y sabroso que entra solo Lo que más me gusta de esta receta es que tiene un equilibrio perfecto: el sabor potente del marisco, el dulzor y especias de la salsa hoisin y la frescura de la lechuga y la cebolla crujiente. Todo ello en un formato que puedes comer con las manos, sin cubiertos ni complicaciones. Es perfecta para llevar en un táper, presentar como aperitivo de picoteo o incluso para un brunch algo más especial. Si tienes invitados, córtalos por la mitad en diagonal, colócalos de pie y verás qué bien lucen. ¡Parece que los haya hecho alguien con estrella Michelin! ¿Se pueden hacer con antelación? ¡Claro que sí! Otro punto a favor: puedes dejar todo preparado con unas horas de antelación y mantenerlos envueltos en film transparente en la nevera. Solo tendrás que sacarlos un poco antes de servir para que pierdan el frío del frigo y se puedan comer con gusto. Y si te sobra relleno, mételo en una ensalada con arroz o con couscous, porque va de maravilla. Si no tienes tortillas de maíz, puedes usar de trigo o incluso láminas de lechuga grandes para una versión más ligera y sin gluten. También puedes cambiar la salsa hoisin por una de yogur con lima o por un toque de mayonesa con wasabi si te va la marcha. Todo ventajas: fáciles, rápidos y con mucho sabor Si buscas una receta original, con ingredientes sencillos y lista en 10 minutos, aquí la tienes. Estos enrollados de marisco son una joya escondida en el mundo de los canapés. Anímate a probarlos y verás cómo te los quitan de las manos. ¡Te van a pedir la receta seguro!