¿Has oído hablar de los blondies ? Pues yo, hasta hace bien poco, no. Se trata de una especie de brownie sin chocolate . Elaborados habitualmente con azúcar moreno, los blondies tienen un sabor dulce y acaramelado que es una auténtica delicia. Una amiga gallega muy aficionada a los dulces me trajo uno de manzana hace unas semanas y, desde que le di el primer bocado, decidí que tenía que hacer la receta. Así que no dejé marchar a mi amiga hasta que me la pasó. Ella también me descubrió hace unos meses, el flan de leche condensada y bizcocho de chocolate , un postre, que combina dos elaboraciones clásicas y que está de rechupete. Suscríbete a Cocina Fácil por 1€/mes y crea tu propio libro de cocina ¡El más grande del mundo! He de comentarte que la receta es sencillísima de hacer y todos los ingredientes que se necesitan son fáciles de encontrar en el mercado. Y, el resultado: espectacular. El blondie queda con una textura ligeramente húmeda y compacta como los brownies y tiene un sabor a manzana caramelizada que es una maravilla. Y para que tú también puedas deleitar tu paladar (y el de los tuyos), aquí te paso la receta. Te recomiendo que la tomes a la hora del desayuno o de la merienda , acompañada con un café o un té, y seguro que tu blondie desaparecerá en un santiamén. No quedarán ni las migas. Pasos esenciales El primer paso a la hora de preparar el blondie de manzana, y para mí el más importante, es tostar la mantequilla . Colócala en una sartén y deja que se derrita mientras va chisporroteando. La clave está en conseguir que la parte sólida de la leche con la que se elabora la mantequilla se dore ligeramente . Esto hace que la mantequilla adquiera un sabor parecido a una nuez tostada que es una maravilla. Ni que decir tiene que, a la hora de comprar la mantequilla, elijas una de alta calidad. Notarás la diferencia. Luego, solo te quedará agregar el azúcar moreno, las manzanas cortadas en daditos , la canela y un pellizco de sal, y cocinar hasta obtener una salsa de caramelo con manzana. Ya verás: la cocina olerá tan rico que tu familia se acercará para descubrir qué estas preparando. En este punto, ten mucho cuidado y no toques la mezcla ya que estará extremadamente caliente. Si tienes niños en casa, lo mejor es que no se acerquen. Una vez la mezcla esté fría, incorpora el huevo, sobre todo que esté bien frío, y la harina. Mezcla bien y reparte la masa en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, de manera que quede una capa fina . Coloca en el horno y deja cocer entre 15 y 20 minutos. Ideas para decorar tu blondie Con glaseado. Coloca el azúcar en un cazo, vierte un poco de agua y mezcla con unas varillas manuales. Debe quedar una mezcla viscosa, pero no líquida. Luego, con la ayuda de una cuchara, forma unos hilos de glaseado por encima de los blondies. Con chocolate fundido. Trocea chocolate negro (también puede ser con leche o blanco), fúndelo al baño maría y dibuja también unos hilos. Con frutos rojos . Arándanos, fresitas, moras, frambuesas… cualquier fruto rojo combinará a la perfección con el dulzor del blondie. Helado. Si quieres dar un toque refrescante a tu blondie, acompáñalo con una bola de helado de nata o de chocolate.