El trigo o el maíz son algunos de los productos que Ucrania exporta más a otros países, pero también lo es el girasol, un ingrediente básico en miles de cocinas del mundo. La complicada situación bélica en Europa ha hecho saltar las alarmas por el desabastecimiento, pero desde la OCU han llamado a la calma transmitiendo un mensaje claro: "no hay motivo para la alarma, para temer un desabastecimiento de aceite de girasol ni de otros productos".
Por el momento, el aceite de girasol que encontramos en el mercado procede de las cosechas del verano pasado, por lo que su producción no se ha visto afectada. La OCU también considera "incomprensible la restricción de las ventas de aceite de girasol que están practicando algunas cadenas de supermercados".
Istock
Acumularlo en casa es contraproducente ya que pierde parte de su calidad y sus propiedades, por lo que es interesante conocer qué alternativas hay, igual de saludables y asequibles y tenerlas en cuenta en la próxima lista de la compra.
Con cualquier de estas opciones no se verá afectado ni el sabor de tus recetas ni la salud ni el bolsillo. Por lo que se convierten en productos perfectos para la sustituir del aceite de girasol e incorporarlos en el día a día de la cocina de casa.
Aceite de oliva
Es uno de los aceites más consumidos en España, con infinidad de opciones y precios gracias a la amplia producción en nuestro país. Nos aporta una gran cantidad de ácidos grasos monoinsaturados, y su utilización es muy amplia, como puede ser en frituras, ensaladas o mayonesas.
Aceite de soja
Rico en ácido oleico y linoleico, es el aceite de mayor producción en el mundo, muy utilizado en la gastronomía asiática. Su composición es muy parecida al de girasol, rica en ácido linoleico (Omega-6).
Aceite de colza
Sus principales "credenciales" son su riqueza en ácidos grasos Omega 3, su aporte en otros nutrientes tan importantes como la vitamina E, la vitamina K y polifenoles de gran poder antioxidante, y su bajo contenido en ácidos grasos saturados. Es perfecto para aliñar sin alterar el sabor de otros productos.
Aceite de orujo de oliva
Otra buena opción ya que es muy estable y es el que mejor aguanta las sucesivas frituras, manteniendo la mayoría de sus componentes exclusivos que ayudan en aspectos de la salud como la protección de la piel o la prevención de las afecciones cardiovasculares.