Cómo ser un anfitrión perfecto en Nochebuena y Navidad y disfrutar (sin agobios) de tus invitados

Para elegir un buen menú, en Cocina Fácil encontrarás las mejores recetas. Y para ser el mejor anfitrión y conseguir un ambiente acogedor solo tienes que seguir nuestras 10 claves. Si tú disfrutas preparando la mesa navideña, tus invitados también lo harán.

Aurora Gonzalo
Aurora Gonzalo

Redactora de Cocina Fácil

Cargando vídeo: Como ser un anfitrion perfecto en Navidad y disfrutar de tus invitados

Como ser un anfitrion perfecto en Navidad y disfrutar de tus invitados

No hay una recompensa mejor para cualquier anfitrión que las sobremesas de Navidad se alarguen y la familia y los amigos no vean el momento de marcharse... ¡Eso significa que hemos sido capaces de crear el ambiente perfecto!

Para que nuestros invitados disfruten al máximo de las comidas y cenas de Navidad, la elección del menú es clave, por supuesto. Pero también lo son los pequeños detalles como la forma en que los recibes, la decoración de la mesa y la presentación de los platos.

Si quieres que tu cena de Nochebuena, la comida de Navidad o la Nochevieja sea un éxito, no dejes nada a la improvisación. Preocúpate por saber las particularidades gastronómicas de cada uno de los comensales (si tienen intolerancias, alergias, si necesitan algún régimen especial...): así podrás diseñar un menú (o menús) con el que todos puedan disfrutar y sentirse mimados.

Ten en cuenta que tan importante son los platos que sirvas como su presentación y, sobre todo, el ambiente que se respire en casa. Y te aseguramos que puedes con todo y sin agobiarte. Solo debes tener en cuenta las 10 claves que te mostramos a continuación... ¡a disfrutar como nunca de estas fiestas!

Las 10 claves para una mesa navideña perfecta

  • Antes de que lleguen los invitados. Despeja el espacio de la sala y retira todo aquello que sea frágil. Ten previsto un lugar donde puedan dejar sus pertenencias (abrigos, bufandas, bolsos..). También te resultará muy práctico habilitar un rincón junto al árbol o instalar una mesilla auxiliar donde puedan ir dejando los regalos, si los llevan.
  • Un buen recibimiento. Así que empiecen a llegar los amigos y familiares a casa, ofréceles algo para beber mientras esperan al resto de invitados. Recuerda: bebidas con y sin alcohol y agua fresca durante toda la velada. Si tienes pensado ofrecer varios aperitivos, sírveles alguno: así tienen algo que hacer mientras esperan la hora de la comida.
  • Sorprende con una mesa espectacular. Si la primera impresión que reciben tus invitados es la de una mesa bien vestida, en la que todos los elementos combinan, el resto de la velada será un éxito. Recuerda: antes de empezar a montarla, protégela con un muletón para que no resbale el mantel y para que apoyarse en ella resulte más acogedor. Además, procura alejar la mesa todo lo que puedas de las paredes para facilitar la movilidad y el servicio.
  • Un mantel bonito y grande. La mesa debe vestirse de gala: un mantel hasta el suelo hará que luzca como nunca. Los manteles en blanco y crudo son siempre un acierto, aunque en Navidad puedes optar por uno rojo, sobre todo si hay niños en casa. Con un camino de mesa contrastado lograrás que la mesa se vea aún más vestida. Las servilletas deben ir a juego con el mantel y, si quieres que la mesa se vea realmente formal, nunca las coloques encima de los platos. Es mejor doblarlas en forma de triángulo o rectángulo y colocarlas a un lado de los platos, pero sin tocar los cubiertos.
  • El centro de mesa, indispensable. Una buena forma de decorar el cento de la mesa es poniendo algunas ramas naturales a lo largo de ella, de modo que no resten mucho espacio. Ten en cuenta que, si vas a servir aperitivos, necesitarás superficie de apoyo para ir dejando las distintas bandejas. Los candelabros o algunos grupos de velas bajitas (siempre sin olor) aportarán un encanto especial.
  • La mejor de tus vajillas. Si tienes bajoplatos, es el momento de lucirlos. Elígelos de color plata, oro, o de porcelana, a juego con la vajilla, y dispón encima el plato llano y el hondo. Las vajillas blancas y las que tienen un filete metálico o de color son las más elegantes para las fiestas navideñas. Asegúrate de que tienes todas las piezas para servir al número de comensales que albergarás en casa. Ten en cuenta que los platos deben tener una separación mínima de 45 cm entre ellos y que deben estar a 3 cm del borde de la mesa. No coloques nunca piezas que presenten desperfectos o rayaduras ni sirvas el plato hondo directamente sobre el matel o el bajoplato.
  • Cubertería reluciente y bien colocada. El consejo que no debes olvidar a la hora de disponer los cubiertos en la mesa es que se colocan de fuera hacia dentro, por orden de uso y en el sitio donde está la mano con la que los vamos a utilizar. Es decir: tenedores a la izquierda; cuchillos (con el filo hacia adentro) y cucharas, a la derecha. Las cucharitas, cuchillos y tenedores de postre, delante del plato, y el cuchillo para la mantequilla, sobre el platillo del pan, en el lado izquierdo del comensal.
Croquis mesa
  • Copas, las justas. No inundes la mesa con todas las piezas de tu cristalería: lo mejor es poner solo la copa de agua y la de los vinos que vayas a servir (blanco, tinto y cava) e ir retirándolas de la mesa a medida que se deja de servir la bebida que contenían. Prescinde de las copas para licores hasta el momento en que vayas a servirlos.
  • Un menú y un marcasitios bonito. Si tienes una letra bonita, no dudes en escribir el menú y el marcasitios con los nombres de los invitados. A todos les gustará saber qué vas a servirles y dónde deben sentarse. Y si prefieres imprimirlos, elige una plantilla bonita: te servirá para dar un punto más de decoración a la mesa.
  • Lúcete en la cocina. Idea un menú equilibrado, en el que no falte un entrante más ligero, como una ensalada o una crema y un segundo más contundente que haga las delicias de los comensales. Y recuerda que tus invitados te agradecerán poder disfrutar de los postres. Tan importante es que no escasee la comida como que no sobre demasiado. Esmérate a la hora de servirlos y sorpréndeles con presentaciones originales (como este salmón en tulipa o este vistoso consomé con hojaldre). Empieza a servir por la persona de más edad y recuerda: coloca los platos siempre por la derecha del comensal.
Preparando la mesa navideña

Y recuerda: aprovecha todo el tiempo que puedas para disfrutar de su compañía, relájate y admira todo lo que has preparado con tanto mimo. Si tú estás feliz y lo pasas bien, seguro que tus invitados también disfrutarán de la velada que has preparado con tanto cariño. Y un último consejo: olvídate de la limpieza hasta que se hayan marchado.