Cómo se prepara el irresistible cheesecake japonés: la tarta de queso "que tiembla"

Prueba este pastel japonés esponjoso tradicional. Es súper jugoso y tiene una textura aireada a la que no podrás resistirte

Tarta de queso japonesa
iStock

Después de probar esta tarta de queso japonesa, te aseguramos que se convertirá en uno de tus postres favoritos. Y es que la combinación dulce que se forma entre texturas y sabores, ¡es toda una delicia!

A decir verdad, pocos pueden resistirse a la tarta de queso, cada vez más extendida por todos los rincones del mundo. Si te gustan las tartas de queso típicas de cada país, tenemos la receta perfecta para verano: una deliciosa tarta de queso crema y melocotón.

Volviendo a nuestra cheesecake, es curioso saber que también se la conoce como “cotton japanese cheesecake”, y es que más allá de su irresistible sabor, esta tarta se caracteriza por su textura ligera y esponjosa semejante a la de un suflé algodonado.

Cheesecake japonés
Para 4 personas
Ingredientes
  • 250 gramos de queso crema
  • 100 mililitros de leche
  • 135 gramos de azúcar
  • 6 huevos
  • 50 gramos de mantequilla
  • 60 gramos de harina
  • 30 gramos de maicena
  • 1 cucharada de zumo de limón
  • Azúcar glas
  • ½ cucharadita de bicarbonato
  • Sal
Paso a paso
  1. Bate el queso crema y la mantequilla

    Precalienta el horno a 160ºC. En un cuenco grande bate el queso crema con la mantequilla a temperatura ambiente hasta obtener una crema espesa. Agrega poco a poco la leche en forma de hilo y remueve con las varillas hasta obtener una mezcla homogénea.

  2. Agrega las yemas

    Separa las yemas de las claras, y reserva las claras para más tarde. Incorpora las yemas una a una a la mezcla anterior sin dejar de remover con las varillas hasta que queden bien integradas. Vierte el zumo de limón, una pizca de sal, y remueve hasta que tengas una masa lisa.

  3. Tamiza la harina y la maicena

    Mezcla la harina y la maicena y pásalas por un tamiz o un colador fino antes de agregarlas a la mezcla del pastel poco a poco y sin dejar de remover con las varillas.

  4. Monta las claras

    Monta las claras con ayuda de un robot de cocina hasta que lleguen a punto de nieve. Agrega el bicarbonato y continúa removiendo las claras. Agrega poco a poco el azúcar mientras el robot sigue removiendo las claras hasta que lleguen a punto de nieve.

  5. Termina la masa del pastel

    Incorpora las claras a punto de nieve a la mezcla anterior con ayuda de una espátula de silicona y haciendo movimientos envolventes. Remueve hasta que tengas una crema lisa y homogénea.

  6. Prepara el molde y hornea el pastel

    Utiliza un molde redondo desmontable, y prepara una bandeja de horno con agua caliente que hará las funciones de baño maría. Cubre la base y las paredes del molde con papel vegetal. Para que el papel se quede pegado a las paredes, puedes untarlas con un poco de mantequilla. Vierte la masa en el molde y hornea el pastel 60 minutos al baño maría.

  7. Desmolda y sirve el pastel

    Retira el pastel del horno y déjalo enfriar sobre una rejilla. Desmolda cuidadosamente el pastel, y déjalo reposar en la nevera al menos un par de horas antes de servirlo espolvoreado con azúcar glas.

Trucos para preparar el cheesecake japonés

  • Un par de horas antes de empezar la elaboración de la tarta, recuerda sacar la mantequilla y el queso crema de la nevera. Su consistencia será mucho mejor si están a temperatura ambiente.
  • Es imprescindible tamizar la harina y la maicena para conseguir la textura perfecta. Para ello, si no tienes un tamiz, mezcla la harina y la maicena en un bol, y pásalas por un colador fino.
  • Para evitar que entre agua del baño maría dentro del pastel, puedes forrar el molde redondo con papel de aluminio.
  • La manera más deliciosa de disfrutarla es servirla espolvoreada con azúcar glas y acompañarla con unos frutos rojos.