Tarta de galletas con stracciatella, postre fácil sin horno ¡en 15 minutos!

Forra el molde

Crea un molde con un cartón, para que se ajuste al tamaño de las galletas. Fórralo con papel de aluminio y film. Si quieres preparar una tarta más grande, elige un molde desmontable rectangular de 20 x 30 cm y colócalo sin el fondo, sobre una bandeja que entre en el congelador. Forra las paredes del molde con papel film, dejando 1 cm sobrante por la base y unos 5 cm por la parte superior.

Haz la base y monta la nata

Coloca una capa de galletas en la base del molde. A continuación, utiliza la batidora de varillas para montar la nata con el azúcar hasta que tenga consistencia. 

Añade el chocolate y cubre las galletas

Con la espátula, mezcla la nata montada y los chips de chocolate o el chocolate troceado con movimientos envolventes. Hazlo con cuidado para evitar que la nata baje. Después, distribuye la stracciatella sobre las galletas y extiéndela bien con la espátula, alisando la parte superior.

Cubre con galletas y congela

Cubre la stracciatella con otra capa de galletas, disponiéndolas igual que hiciste con las de la base. Así, cuando cortes el pastel tendrás porciones individuales fáciles de coger (y de comer). Cubre el molde con papel film y congela el pastel durante 5 horas.

Desmolda y corta en porciones

Saca el pastel del congelador. Desmóldalo y córtalo en porciones, de manera que cada una lleve dos galletas enteras: una por encima y otra por debajo. Puedes guardar las porciones restantes en el congelador... ¡Pero seguro que no sobra ni una!