Las recetas de la abuela nunca decepcionan, y esta tarta de galletas y chocolate no iba a ser menos. Un postre clásico que cautivará a todos con su sabor excepcional y su textura cremosa . Con capas de galletas empapadas en café, relleno de crema pastelera y una cobertura de chocolate, esta delicia se convertirá en el placer culinario perfecto para cualquier ocasión. Su preparación sencilla y el resultado final, tan delicioso, hacen de esta tarta de la abuela un tesoro gastronómico que nunca pasa de moda . Una receta sin horno para triunfar todo el año Lo mejor de esta tarta, además de su sabor, es que no necesita horno ni batidoras eléctricas ni complicaciones . Es una receta ideal para hacer con niños, para lucirte en una reunión familiar o para darte un capricho entre semana. El truco está en montar bien las capas y dejar que enfríe el tiempo suficiente. Si quieres una versión más ligera, puedes sustituir la leche condensada por leche evaporada con un toque de azúcar, o reducir el número de capas. Si te gusta más intensa, prueba a mojar las galletas en licor de café o en un chorrito de brandy. Y si buscas un toque crujiente, espolvorea frutos secos picados en alguna de las capas. Un dulce que sabe a infancia y se prepara en un ratito Esta tarta fría de la abuela tiene ese algo especial que la convierte en favorita. Es un postre que no pasa de moda , que puedes adaptar a tu gusto y que siempre, siempre queda bien. Incluso si te da pereza encender el horno o no te consideras muy repostero, con esta receta no hay margen de error. Así que ya sabes, si tienes galletas María, un poco de leche, chocolate y ganas de endulzarte el día, ponte manos a la obra. ¡Tu nevera hará el resto! No te olvides de reservarte un trozo generoso , porque te aseguro que no va a sobrar ni una miga.