Si te gustan los dulces sencillos y rápidos de preparar, esta idea te encantará. Son los típicos lacitos que se preparan fácilmente con una lámina de hojaldre, solo hay que extenderla, pasar el rodillo, cortar rectángulos y trenzarlos antes de meter al horno, pincelados con huevo. ¡Más fácil, imposible! Se espolvorean con azúcar glas, pero puedes incluir otros acabados a tu gusto: untando una parte en chocolate fundido o rellenarlos con cabello de ángel, por ejemplo.