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Cómo hacer un tronco de Navidad clásico (sí, es fácil)

Una plancha de bizcocho, un relleno que te guste, un poco de maña al enrollarlos y ya tienes un postre de Navidad delicioso. ¿Te animas a seguir nuestra receta? Es la más clásica: relleno de nata y cubierto con chocolate.

Marina Blanco, colaboradora de Cocina Fácil
Marina Blanco

Experta en cocina

Tronco de Navidad
Cocina Fácil

Aunque sea un dulce navideño típico de Francia, el tronco de Navidad ya es tradición en muchos hogares españoles. Un fino bizcocho enrollado relleno de nata y cubierto por una crema de chocolate, es muy fácil de hacer y perfecto para estas fechas.

Si aún no habías pensado en el postre para la cena de Navidad, este tronco de chocolate y nata montada puede ser una excelente innovación para este año.

Quizás te parezca una receta complicada, pero no lo es, únicamente necesitarás algo de tiempo para prepararla porque es laboriosa. Además todos los ingredientes que necesitas son muy fáciles de conseguir, e incluso muchos de ellos ya los tendrás en casa.

Lo importante es que te tomes tu tiempo para hacerlo, ya que su apariencia es fundamental. ¡Tiene que parecer un tronco! Si no, sería un brazo de gitano. Y es que este dulce navideño, como su propio nombre indica, pretende imitar el aspecto de los pequeños troncos que se utilizan en Navidad para encender la chimenea.

Cómo hacer un tronco de Navidad clásico

Sigue la receta paso a paso y conseguirás un postre excelente, muy vistoso y que además, le encantará a tus invitados.

Tronco de Navidad de nata y chocolate
Para 4 personas
Ingredientes
  • 125 gramos de harina
  • 125 gramos de azúcar
  • 5 huevos
  • 2 cucharadas de cacao en polvo
  • Una pizca de sal
    Para el relleno
  • 500 mililitros de nata para montar
  • 75 gramos de azúcar
    Para la cobertura
  • 300 gramos de nata líquida (mínimo 15% de materia grasa)
  • 100 gramos de chocolate negro
  • 50 gramos de almendra crocanti
  • Una barqueta de grosellas o arándanos
Paso a paso

  1. Hornea el bizcocho

    Precalienta el horno a 180º y prepara la masa del bizcocho. Con ayuda de unas varillas, mezcla los huevos con el azúcar hasta que hayan doblado su volumen y adquiera consistencia. Añade la harina tamizada, el cacao y una pizca de sal, y mueve la mezcla cuidadosamente. Extiende la mezcla sobre una bandeja de horno con papel sulfurizado y hornea durante 7 minutos hasta que quede una base dorada.

  2. Elabora el relleno

    Monta la nata para el relleno con ayuda de unas varillas. Si tienes, utiliza las eléctricas para agilizar el proceso. Cuando tengas la nata montada, espolvorea el azúcar y mezcla con movimientos envolventes. Utiliza una lengua de silicona para untar con la nata toda la superficie del bizcocho.

  3. Enrolla el bizcocho

    Utiliza el papel sulfurizado para ayudarte a enrollar el bizcocho. Mientras vas haciendo el rulo, presiona ligeramente y con mucho cuidado de no romperlo. Si sale nata por los lados, retírala con la lengua de silicona.

  4. Prepara la cobertura de chocolate

    Calienta 100 gramos de nata y añade el chocolate troceado. A temperatura media, remueve hasta que se funda. Retira la mezcla del fuego, incorpora el resto de la nata poco a poco y mueve la mezcla hasta obtener una crema.

  5. Decora el tronco de Navidad

    Unta el tronco de Navidad con la crema de chocolate. Si quieres un aspecto más similar al de un tronco de verdad, puedes hacerle unas marcas a lo largo con ayuda de un peine de repostería o un tenedor. Espolvorea con el crocanti de almendras y decóralo con unas grosellas o arándanos.

Consejos y variantes para el tronco de Navidad

  • Puedes hacer un tronco nevado espolvoreando azúcar glas sobre la crema de chocolate y esparcirle por encima unas lascas de chocolate negro. Si además añades unas hojas de menta o hierbabuena fresca, el resultado será inmejorable.
  • Para conseguir un bizcocho perfecto es necesario tamizar la harina, así evitarás que te queden grumos en la masa. Si no dispones de un tamiz, un colador fino hará la misma función.
  • Rellena tu tronco de Navidad como más te guste, siempre puedes escoger opciones como mermeladas caseras, una crema de trufa o una delicada crema pastelera con un toque de vainilla.
  • Un truco para que la nata monte bien es que esté bien fría, y enfriar también previamente el bol donde la vas a montar en el congelador.
  • Si prefieres un relleno con un toque crujiente, puedes picar unas nueces y espolvorearlas sobre la nata montada antes de enrollar el tronco de Navidad.
  • La plancha de bizcocho también puede ser blanca; no le añadas el cacao en polvo y listo. Conviene que su sabor sea lo más neutro posible, para que no compita con el del relleno.

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