Pela los pepinos, elimina las pepitas y rállalos, sálalos y déjalos en un escurridor al menos 1 hora para que pierdan toda el agua. Adereza el pepino con un poquito de zumo de limón y aceite de oliva, agrega el yogur, el comino y la menta fresca picada, remueve hasta que todo esté integrado y deja reposar en la nevera mínimo 2 horas para que se asienten todos los sabores.