No solo cocos: la dieta de los concursantes de Supervivientes

No cabe duda de que, a día de hoy, Supervivientes es el concurso más extremo de la televisión española. Tampoco que la escasez de comida es el principal detonante de todos los enfrentamientos de los concursantes, tanto en la playa como en la palapa, y también la causa de que, cuando se miran al espejo tras terminar su aventura, apenas se reconozcan. Los esfuerzos físicos que realizan cada día, las duras pruebas que les prepara la organización para disputarse las recompensas, las noches a la intemperie, el calor abrasador... se vuelven mucho más difíciles cuando hay hambre, algo que también afecta al humor de los concursantes.

Y es que el hecho de que no puedan pescar todo lo que les gustaría, porque algunas especies están protegidas y Supervivientes aboga por el completo respeto del hábitat en el que se desarrolla, hace que buscar comida se vuelva mucho más difícil, por no hablar de lo que, en ocasiones, se les complica hacer fuego para cocinar los alimentos que consiguen recolectar. Bueno, o los que la organización les da como parte de la dotación mínima diaria por concursante. Te contamos cuáles son estos alimentos de los que disponen los participantes del reality show.

¿Qué comen los concursantes de Supervivientes?

Hay ocasiones en las que algún concursante de Supervivientes tiene la suerte de disfrutar de alguna recompensa gastronómica tras darlo todo en las pruebas. Pizza, lasaña, bandejas de ibéricos, patatas fritas y hasta carne, muy de vez en cuando, son algunos de los manjares ricos en grasa de los que pueden disfrutar, en apenas unos minutos, algunos afortunados bajo la desoladora mirada del resto de concursantes, con quien, en ocasiones, la organización del programa les permite compartirlo.

 

Los concursantes de Supervivientes se disputan pruebas físicas para luchar por las recompensas gastronómicas, que facilitan su vida en la isla.

Sin embargo, y a pesar de que es un reality de supervivencia extrema, el equipo dota de un alimento mínimo diario a cada uno de los concursantes, además de agua y bebida isotónica sin límite, para evitar la deshidratación y soportar las extremas condiciones climatológicas que se viven en Honduras. A ellas, debemos sumarles el arroz y las legumbres, algo de lo que disponen en mayor o menos medida, en función de la playa que les toque.

• Los más afortunados, que este año se van pasando por Playa Calma, cuentan con una asignación diaria de 30 gramos de arroz integral y 20 gramos de lentejas por persona. Además, la organización les da 6 latas que deben repartir entre todos.
• El equipo que pierde la prueba, debe pasar la semana en Playa Furia, donde dispone de menos recursos. Allí, cada concursante tiene tan solo 40 gramos de arroz integral al día, además de 4 latas para repartir entre todos.

Pero, ¿qué llevan las latas? Pues no tienen etiqueta, por lo que los concursantes no conocen su contenido hasta que las abren y, les guste o no, deben comérselo si no quieren que se estropee. Eso sí, todas las latas contienen proteína y los supervivientes no dudan en comérselas enteras, independientemente de su contenido. "Aprovechábamos todo, el aceitillo y todo. No se tiraba nada", contaba Mario González, concursante de la edición de 2024 de Supervivientes, en una entrevista sobre su aventura.

Los cocos que se caen de los árboles son, además, otro de su sustento principal y, aunque algunos concursantes reniegan de ellos al principio, terminan siendo un consuelo para su estómago con el paso de los días.

 

Tras ganar una prueba, los concursantes pueden elegir entre las recompensas que, normalmente, son para saciar su hambre o facilitar la vida del grupo en la playa.

Y esto es todo lo que comen en Supervivientes, algunos con más facilidades que otros porque, en función de la isla y de las recompensas que ganen, también podrán conseguir cazuelas para cocinar o kit de pesca que harán mucho más llevadera su aventura en la playa.