En cuanto el termómetro sube y el sol aprieta, todos tenemos claro que hay platos que pasan a un segundo plano. Adiós, estofados. Hasta pronto, sopas calientes. Hola, gazpacho. Fresquito, ligero, lleno de sabor y fácil de preparar, el gazpacho es ese comodín veraniego que no puede faltar en ninguna casa. Y si alguien sabe cómo preparar el gazpacho perfecto, esa es Samantha Vallejo-Nágera, chef y uno de los rostros más populares de la televisión gracias a su papel como jurado en MasterChef.
Samantha lo tiene clarísimo: “Para mí no hay verano sin gazpacho”. Y lo dice con la autoridad de quien lo ha cocinado para cientos de personas. Su versión del gazpacho es rápida, sencilla y tiene un punto de intuición que la hace todavía más interesante. Porque, como buena cocinera, Samantha no sigue cantidades estrictas: prefiere probar, ajustar y dejarse llevar por los gustos personales. Por ejemplo, en cuanto al vinagre,
Y lo cierto es que su receta no solo es deliciosa, también es muy saludable. El gazpacho, al estar hecho a base de verduras crudas, mantiene intactas todas sus propiedades; es rico en fibra, antioxidantes, vitaminas, minerales… y muy bajo en calorías. Vamos, que además de refrescarte, te ayuda a cuidarte.
El gazpacho de Samantha Vallejo-Nágera
Para 4 personas
Ingredientes
- 10 tomates de rama, bien rojos y maduros
- 1/2 pepino
- 1/2 cebolla
- 1/2 pimiento verde
- 1/2 pimiento rojo
- 1 diente de ajo
- Sal al gusto
- Vinagre de Jerez
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
Paso a paso. Así se hace su gazpacho perfecto
Haz una especie de ensalada de ingredientes
En vez de medir al milímetro, Samantha junta todos los ingredientes como si fuera a preparar una ensalada: tomates troceados, pepino, pimientos, cebolla y ajo. Así comprueba visualmente si el equilibrio es el adecuado.
Prepara el aliño a tu gusto
Añade sal y un chorro generoso de vinagre. Mezcla y prueba la vinagreta. Este paso es clave: ajustar el vinagre antes de triturar evita sustos de última hora.
Tritura con fuerza
Pasa todo al vaso batidor y tritura varios minutos a máxima potencia con el aceite de oliva ya añadido. Eso le dará una textura más sedosa y un sabor más integrado.
Cuela para perfeccionar
Pasa la mezcla por un colador fino o chino para eliminar pieles y pepitas. Esto hace que el gazpacho quede más fino y elegante.
Trucos de Samantha para sacar un gazpacho perfecto
- Samantha insiste mucho en la maduración de los tomates. Nada de tomarlos recién salidos del frigorífico: “Hay que dejarlos unos días en la encimera, fuera de la nevera, para que estén en su punto”. Así, el sabor se potencia y el gazpacho gana cuerpo y dulzor de manera natural.
- Guarda el gazpacho en una botella hermética y mantenlo en la nevera. “Aguanta tres o cuatro días sin problema”, asegura.
- Si te gusta más ligero o lo notas muy espeso, puedes añadir unos cubitos de hielo justo antes de servirlo. Le bajarán la temperatura y suavizarán la textura.
- ¿Y para acompañar? Samantha se decanta por el picadillo de verduras, los picos de Jerez y el clásico huevo duro. Eso sí, al gusto del comensal. El gazpacho puede tomarse solo o con la guarnición que prefieras.
Samantha no se complica: no le echa pan, ni fruta, ni experimentos de moda. Su receta es un homenaje al gazpacho tradicional, ese que nuestras abuelas preparaban con lo que daba el huerto, y que sigue conquistando mesas porque es sabroso, sano y, sobre todo, refrescante.
Lo que sí aporta Samantha es una mirada intuitiva y práctica, si los tomates están buenos, si el aceite es de calidad y si pruebas bien la vinagreta, no necesitas nada más. Y, aunque no lo diga abiertamente, en su forma de explicar la receta hay un mensaje claro: el mejor gazpacho no siempre se mide en cucharadas, sino en sentido común.
Con esta receta no solo vas a preparar un gazpacho de diez, sino que también vas a entender por qué para Samantha no hay verano sin esta sopa fría. Es fácil, rápida, llena de sabor y un aliado perfecto para esos días en los que solo apetece algo ligero y natural. ¿Te animas a probarlo? Ideal para tomar como primer plato, como tentempié o incluso como cena, si lo acompañas de algo de proteína.
Y si tienes invitados, mejor aún, sírvelo en vasitos pequeños con una gota de aceite de oliva por encima y un poco de verdura picada. Triunfo asegurado.
Porque al final, como bien sabe Samantha, el éxito de un plato no está en lo sofisticado… sino en lo bueno que esté. Y este gazpacho, sin duda, está buenísimo.