El calabacín demuestra ser un ingrediente extremadamente versátil, capaz de ser aprovechado en todas sus formas. Imagina unos espaguetis de calabacín salteados , la icónica versión en tortilla e incluso sorprendentes buñuelos rellenos , entre muchas otras opciones. Su valor reside en su capacidad para conquistar los paladares tanto jóvenes como adultos, y puede ser cocinado de formas tan creativas que incluso aquellos menos entusiastas de las verduras logren apreciarlo. Aquí tienes otra alternativa para transformar esta deliciosa hortaliza . El procedimiento es simple: se inicia cortando el calabacín en finas rodajas para luego cocinarlas. Luego, se empiezan a superponer capas de calabacín, pechuga de pavo o jamón cocido, según tu preferencia, y queso. Es fundamental repetir este proceso al menos un par de veces para obtener el resultado deseado. Finalmente, se corona con queso rallado y ¡listo! Así de fácil tendrás un plato irresistible. Si no eres fan del calabacín pero te ha gustado la receta , te animamos a probarla con berenjena , pimiento o incluso con champiñones . Simplemente debes seguir el mismo paso a paso pero sustituir el calabacín por la verdura que más te guste, te apetezca en el momento o tengas a mano ese día. Al igual que puedes variar el ingrediente estrella de la receta, puedes optar por eliminar o sustituir los ingredientes que se añaden en esta. Ya sea la pechuga de pavo o jamón cocido, el tipo de queso que le pongas o la salsa de tomate. Deja volar tu imaginación y sorpréndete con el resultado de esta receta deliciosa.