La tarta de queso es uno de esos placeres universales. Dulce, cremosa, suave… Y si encima es de las que venden ya hechas, ni te cuento: abres, cortas, comes. Pero claro, luego miras la etiqueta y te llevas las manos a la cabeza. Azúcar refinado, grasas poco recomendables y una lista de ingredientes que da más miedo que alegría.
Puedes preparar algunas versiones más saludables como esta tarta de queso cottage, yogur y miel:
Carlos Ríos, experto en cocina saludable, autor y abanderado del movimiento Realfooding, ha compartido en su perfil de Instagram (@carlosriosq) otra alternativa sana, casera y tan fácil de preparar que parece mentira. Y el truco está en un ingrediente que lo cambia todo: la pasta de dátil.
“Hoy os traigo la alternativa realfooder a la tarta de queso del supermercado, que lleva nada más y nada menos que 33 gramos de azúcar refinado”, explicaba Carlos en su publicación. Y con razón. En lugar del típico azúcar blanco, él apuesta por un endulzante natural, sin refinar y lleno de nutrientes. ¿El resultado? Una tarta de queso real, sabrosa y sin necesidad de añadirle azúcar industrial.
El poder dulce de los dátiles
La pasta de dátil no es más que dátiles triturados hasta obtener una crema espesa, dulce y muy versátil. Carlos la utiliza como sustituto directo del azúcar, y asegura que es una de las mejores formas de endulzar postres sin caer en lo ultraprocesado. “Nosotros la hemos elaborado con ingredientes reales”, explica. Y no hay trampa: solo productos sencillos, que puedes encontrar fácilmente y que, además, sientan bien.
En esta receta, la pasta de dátil se integra perfectamente con el resto de ingredientes, aportando dulzor sin dominar el sabor. Además, al tratarse de un azúcar naturalmente presente en la fruta, tiene un impacto glucémico menor y un perfil nutricional más completo.
Tarta de queso realfooder
Para 4 personas
Ingredientes
- 1 tarrina de queso untable
- 120 g de yogur griego natural
- 2 huevos
- 2 cucharaditas de pasta de dátil
- Ralladura de limón al gusto
Paso a paso sin complicaciones
Junta todos los ingredientes
En un bol, añade el queso crema, el yogur, los huevos, la pasta de dátil y la ralladura de limón.
Integra hasta formar una crema
Con la ayuda de unas varillas, bate bien hasta obtener una mezcla homogénea y cremosa.
Prepara un molde apto para horno
Forra un molde pequeño o un bol apto para horno con papel vegetal. Vierte la mezcla y alísala un poco con una espátula
Hornea
Cocina en la airfryer a 180 ºC durante 16-18 minutos. Si la haces en horno tradicional, hornea a la misma temperatura durante 25 minutos.
Reposa
Saca, deja templar… y disfruta.
El resultado es una tarta con una textura delicada, sabor suave y ese toque fresco de limón que redondea el conjunto. Y lo mejor: sin una pizca de azúcar refinado.
Más fácil, más sano y sin renunciar al placer
Carlos Ríos lleva años demostrando que comer bien no está reñido con disfrutar. Esta receta de tarta de queso es la prueba perfecta. “Elaborado con leche pasteurizada y fermentos vivos, es una fuente de proteína láctea de muy buena calidad”, dice sobre el queso untable que utiliza. Pero lo más importante es que, con unos pocos ingredientes reales, se puede preparar en casa un postre delicioso que no tiene nada que envidiar a los de vitrina.
La combinación de queso y yogur aporta cremosidad, los huevos le dan cuerpo, y la pasta de dátil hace su magia sin necesidad de químicos ni conservantes. Además, es una receta apta para preparar en airfryer, lo cual agiliza el proceso y permite ahorrar energía. ¿Qué más se puede pedir?
Una receta para repetir (y compartir)
Esta tarta de queso tiene ese equilibrio perfecto entre placer y salud que tanto cuesta encontrar. No empalaga, no se siente pesada y, además, es fácil de adaptar: si quieres puedes añadir un poco de canela, cambiar la ralladura por vainilla, o incluso ponerle una base de frutos secos triturados.
Y si tienes invitados, es la típica receta que sorprende. Nadie diría que no lleva azúcar. Nadie pensará que es “de esas cosas sanas”. Solo sabrán que está rica. Y con eso basta.