Cómo hacer un caldo de ave bien sabroso (con vídeo)

Con paciencia, buenos ingredientes y tiempo para que se vayan integrando los sabores poco a poco. Mira en nuestra videorreceta cómo hacer un fondo blanco de ave que te servirá de base para sopas y otras recetas.

Cómo hacer un caldo de ave perfecto
Irene Requena
Irene Requena

Colaboradora

No todo sirve para hacer un caldo. En nuestra videorreceta te mostramos todos los pasos para hacer lo que se denomina un fondo blanco. La diferencia entre ambos términos es por la concentración del líquido, el fondo es más concentrado que el caldo y, por lo tanto, resulta más sabroso y aromático.

Un caldo bien hecho tiene que quedar transparente, aunque con algo de coloración de los ingredientes que se incluyen en su elaboración.

El fondo blanco es un básico en la cocina que solo requiere de un poquito de paciencia, primero para ir espumando y sacando los posibles residuos y después para que se integren los sabores de los ingredientes a fuego lento.

Caldo de ave (o fondo blanco)
Para 4 personas
Ingredientes
  • 1 kg de carne de ave
  • 75 g de cebolla
  • 75 g de zanahoria
  • 50 g de champiñones
  • 50 g de puerros
  • 25 g de apio
  • Laurel
  • Tomillo
  • Tallos de perejil
  • Pimienta blanca en grano
  • Agua y sal
Paso a paso
  1. Retira las plumas

    Lava las alas, retira las plumas y con un soplete o al fuego, quema las que cueste más de sacar.

  2. Agrega la carne

    Añade la carne en agua fría y deja cocer a fuego fuerte durante dos minutos.

  3. Saca el agua

    Retira esa agua, pasa la carne por el grifo y pon agua nueva en la cazuela.

  4. Ve espumando

    Lleva a ebullición el caldo y ve retirando la espuma que se forma y las manchas de aceite.

  5. Corta las verduras

    Pela las cebollas y las zanahorias y corta luego todas las verduras en trozos similares.

  6. Echa las hierbas

    Añade el laurel, tomillo, perejil y la pimienta.

  7. Añade las verduras

    Cuando el caldo comience a hervir, añade las verduras, las especias y las hierbas.

  8. Cuece a fuego lento

    Cuece semitapado, durante al menos 4 horas, a fuego lento.

  9. Desengrasa el caldo

    Finalmente, desengrasa el caldo, cuélalo y deja enfriar.

El caldo, cuando lo tengas frío, puedes conservarlo en la nevera unos días, si lo vas a utilizar en breve o congelarlo, bien en pequeñas porciones (como cubitos) o en recipientes más grandes.

Con él puedes preparar luego estupendas sopas de fideos, cremas de verduras o un arroz con pollo y verduras.