Si nos imaginamos una cena con amigos, seguro que pasa por nuestra mente una buena fondue casera, el plato nacional suizo a base de queso , un poco de vino blanco o kirsch y condimentos como la nuez moscada y la pimienta. ¿El acompañamiento? Un buen pan de pueblo con mucha miga y que tenga una corteza gruesa, la mejor forma es cortarlo en dados y que estén tostados, así el queso se quedará adherido al pan hasta cubrirlo por completo. Para preparar la fondue lo primero que necesitarás será un recipiente que sea lo más auténtico posible, lo mejor es que consigas el caquelon , una cazuela de cerámica, barro cocido o hierro fundido utilizada tradicionalmente para este tipo de elaboraciones. Asegúrate de que lleve un asa cortita para poderla transportar sin peligro de que te quemes. Además necesitarás brochetas para poder pinchar el pan e introducirlo en el queso, es mucho más cómodo y práctico que utilizar un tenedor. Fondue de queso Para 4 personas Ingredientes 250 gramos de queso gruyère 250 gramos de queso emmental 1 diente de ajo 100 mililitros de vino blanco 1 cucharadita de maicena 1 chorrito de leche Nuez moscada Pimienta 1 hogaza de pan de pueblo Paso a paso Corta el pan Corta la hogaza de pan en rebanadas gruesas. Luego, estas en tiras y finalmente en dados. Ralla los quesos Ralla los quesos y resérvalos en un recipiente hasta el momento de utilizarlos. El queso también puedes agregarlo a la fondue cortado en trocitos pequeños, pero si lo añades ya rallado será mucho más fácil y rápido que se funda. Prepara la fondue y agrega el vino Corta el ajo a la mitad y pásalo por las paredes y el fondo de la marmita, así se impregnará de su sabor. Coloca la marmita sobre el fuego y ponla a calentar. Una vez caliente, vierte el vino blanco hasta que comience a humear. Incorpora los quesos Agrega a la fondue los quesos rallados removiendo continuamente con una cuchara de madera y baja el fuego a temperatura media para que los quesos se vayan fundiendo poco a poco y de manera uniforme. Diluye la maicena en un chorrito de leche y agrégala a la fondue. Adereza con un poco de pimienta y una pizca de nuez moscada. Sirve la fondue Coloca la fondue en el centro de la mesa sobre su propio soporte y coloca debajo el fogón a fuego bajo para que la fondue se mantenga caliente y el queso conserve su textura. Sírvela acompañada con el pan de pueblo.