Torrijas a la canela con aguamiel

Prueba estas torrijas a la canela con aguamiel. Presentadas en forma de daditos, se bañan con leche, azúcar, canela y cáscara de limón. Luego se rebozan con huevo y se fríen. Al final, se untan con un almíbar hecho con agua y miel.

PASO A PASO PARA REALIZAR TORRIJAS DE BOCADO A LA CANELA CON AGUAMIEL: RESULTADO FINAL.
8 personas
40 min

5

(7 votos)

Temporada:

Semana Santa

Técnica:

Fritura

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Media

A pesar de su sencillez, las torrijas siempre despiertan pasiones. Ligadas tradicionalmente a la Semana Santa, aunque son muchos los que se dan el capricho durante todo el año, este dulce casero conquista a todo el mundo por su textura crujiente y su jugoso interior. Si te apetece disfrutar de unas torrijas exquisitas que se deshacen en la boca, no te pierdas la receta que te proponemos hoy. Se trata de unas torrijas a la canela con aguamiel. Se convertirán en tus preferidas.

Estas torrijas se elaboran de la manera clásica, pero, en lugar de cortar el pan en rebanadas, este se parte en daditos para poder comerlos de un bocado. Los daditos de pan se sumergen en leche hervida con azúcar, canela y cáscara de limón, se pasan por huevo batido y luego se fríen en abundante aceite caliente hasta que quedan doraditos. Una vez fríos, se bañan con el delicioso almíbar de aguamiel. Preséntalos recién hechos, con unas ramitas de canela y unas hojitas de menta y… no habrá nadie que se resista.

Además de la receta clásica de torrijas, podemos encontrar otras variantes igual de deliciosas. Se pueden preparar a la naranja con licor, rellenas de crema pastelera o rebozadas a la vainilla con guindas. ¿Con cuál te quedas?

Ingredientes paraTorrijas a la canela con aguamiel

  • 375 mililitros de leche
  • 40 gramos de azúcar
  • 1 vaina de canela
  • 1 limón
  • ½ barra de pan del día anterior
  • 1 huevo
  • aceite de oliva
  • para el almíbar
  • 50 mililitros de miel
  • para decorar
  • vaina de canela
  • menta

1. Limpia el limón

Lava el limón, sécalo con papel de cocina y retira la piel con cuidado. Para que no amargue, procura cortar solo la parte amarilla.

2. Calienta la leche

Vierte la leche en un cazo, con el azúcar, la rama de canela y la cáscara de limón, y caliéntala hasta que llegue a ebullición. Retira del fuego, deja que se enfríe y cuélala.

3. Corta el pan

Corta el pan en dados de unos 3 x 3 cm, disponlos en una bandeja o un molde y báñalos con la leche infusionada. Dales la vuelta y deja que se empapen bien por todos lados.

3. Corta el pan

4. Prepara el almíbar

Pon 50 mililitros de agua en un cazo, añade la miel y cuece a fuego suave, removiendo, entre 3 y 4 minutos. Retira el almíbar del fuego y deja enfriar.

4. Prepara el almíbar

5. Pasa las torrijas por huevo

Casca el huevo en un plato hondo y bátelo con un tenedor. Escurre ligeramente los dados de pan y pásalos por el huevo, con cuidado para que no se rompan.

6. Fríe por tandas

Vierte abundante aceite en una sartén honda y fríe las torrijas por tandas, hasta que se doren por todos lados. Retíralas con una espumadera y déjalas escurrir sobre papel de cocina para eliminar el exceso de grasa. Espera a que se enfríen, báñalas en el almíbar y repártelas en unos platos de postre. En el momento de servir, decóralas con canela en rama y la menta lavada.

El truco

Aromatiza la leche con cáscara de naranja y espolvorea las torrijas con unas tiritas de piel de este cítrico.

Ideas para conseguir unas torrijas a la canela con aguamiel perfectas

  • Para que las torrijas te queden superjugosas es importante que el pan sea del día anterior o, incluso, de dos días antes. El pan seco absorberá mejor la leche. En nuestra receta lo hemos cortado en daditos, pero también lo puedes partir en rebanadas. Procura que tengan unos dos centímetros de grosor.
  • Aunque las torrijas se pueden hacer con cualquier pan, no dejan de ser una estupenda receta de aprovechamiento, lo ideal es usar un pan de buena calidad que tenga la corteza fina y la miga densa para que en el momento de absorber la leche mantenga su estructura.
  • Una vez tengas la leche infusionada, deja que se enfríe antes de sumergir los daditos de pan en ella. Si está muy caliente puede que te quedes con medio trozo de pan en la mano.
  • En el momento de freír las torrijas en la sartén, lo ideal es hacerlo por tandas y pocas cada vez. Así se freirán muy rápido, no absorberán aceite y quedarán crujientes. Una vez fritas, déjalas siempre sobre papel absorbente de cocina para que suelten el aceite.
  • Las torrijas se pueden comer solas o acompañadas de fruta fresca, mermelada, nueces picadas, un chorrito de crema inglesa, salsa de chocolate o una bola de helado.
¿Has preparado esta receta?

Marcar como cocinada

Notas de cocina

Comparte las notas de tu cocinado con otros usuarios o envía un mensaje privado

Mis notas
Las más útiles
Todas

¿Te ha gustado esta receta?

Puedes guardarla en tus favoritos, imprimirla o compartirla