El rodaballo es un magnífico pez de forma romboidal que vive en los fondos marinos y puede llegar a pesar hasta 12 kg, aunque actualmente también se cría en piscifactorías. El tamaño para consumo oscila entre los 30 cm y 60 cm, aunque pueden llegar a 100 cm. Nuestra receta se acompaña de la típica salsa vizcaína , que proviene del País Vasco y que con más frecuencia se utiliza para el bacalao , pero también se preparan carnes o verduras, como las coles de bruselas . Los puristas utilizan solo la carne del pimiento choricero remojada en agua caliente, pero hay muchas recetas, como la nuestra, en las que se incopora salsa de tomate. Eso sí, es una salsa que debe quedar muy fina. Para ello, necesitamos la ayuda de un colador chino . Si te gusta este pescado, pruébalo también al cava o con berberechos . Son deliciosas las recetas con el rodaballo como protagonista. Consejos para un rodaballo con almejas a la vizcaína perfecto: El primer paso, imprescindible para que no te estropee el plato la posible arenilla, es dejar las almejas en agua fría con sal una hora mínimo, pero si puedes dejarlas dos, mejor. El pimiento choricero para esta receta se deja en reposo 1 hora en agua caliente. No hay que confundir con la ñora, que aunque se parecen no es lo mismo y la salsa vizcaína se prepara con la carne del puntiagudo pimiento choricero. La cebolla hay que cortarla lo más fina posible y pasarla por la sartén a fuego lento pero sin que llegue a dorarse. Aunque la receta original de la salsa vizcaína no incorporaba tomate, en la mayoría de ocasiones se prepara con tomate, cortado a dados que se añaden a la vez que el pimiento choricero, porque da muy buen sabor. Si no sueles utilizar colador chino, para que esta receta te quede perfecta lo necesitarás. La textura de la salsa debe ser fina pero espesa. Para ello, primero se trituran los ingredientes en el pasapurés: cebolla, pan frito, ajos, estragón, pimiento choricero y tomate y luego se pasan por el chino.