Para que el nido quede tan bonito como en la foto, es importante que las judías verdes estén al dente . O sea, tiernas, pero enteras y ligeramente crujientes. Para conseguirlo, una vez las tengas cortadas en tiras finas, cuécelas en una olla con agua salada entre 6 o 7 minutos. Luego, pásalas enseguida a un cuenco lleno de agua con hielo . Así lograrás que tengan un color verde brillante. Si quieres incorporar más recetas con judías verdes a tus menús, fíjate en las judías verdes y huevo escalfado con sobrasada , en las judías verdes a la provenzal o las judías verdes con cítricos y frutos secos .