Coulant de chocolate con helado de vainilla

Paso 1

Prepara el helado. Abre la vainilla por la mitad a lo largo y retira las semillas. Disponlas en un cazo, vierte la leche y lleva a ebullición. Deja templar y cuela.

Paso 2

Bate las yemas con el azúcar en un cuenco. Agrega la leche, poco a poco y removiendo. Ponla de nuevo al fuego y cuece hasta que espese. Monta la nata e incorpórala, con movimientos envolventes. Deja enfriar.

Paso 3

Vierte la mezcla en un molde, tapa con film y congela 45 minutos. Bátela con un tenedor para romper los cristales de hielo. Vuelve a congelar y repite la operación dos veces. Deja el helado en el congelador al menos 4 horas y retíralo 5 minutos antes de tomarlo.

Paso 4

Funde el chocolate con 200 g de mantequilla al baño maría. Retira y deja templar. Casca los huevos en un cuenco. Agrega el azúcar y bátelos, con varillas, hasta que estén espumosos. Añade la crema de chocolate y mezcla hasta integrarla.

Paso 5

Tamiza la harina y añádela a la preparación anterior, en tres veces y sin dejar de remover hasta que se integre. Agrega la sal y mezcla.

Paso 6

Engrasa 6 flaneritas con el resto de la mantequilla y espolvoréalas con cacao. Rellena los moldes con la masa hasta 3/4 partes de su capacidad y congela 3 horas. Unos 25 minutos antes de servir, precalienta el horno a 190o y cuece los coulants 13 o 14 minutos. Antes de retirarlos, pínchalos con un palillo; el interior debe quedar semilíquido y el exterior lo suficientemente cocido para que mantengan la forma.

Paso 7

Desmóldalos con cuidado y repártelos en los platos. Espolvoréalos con azúcar glas y sírvelos con una bola de helado de vainilla.